Arzalluz acusa al PP y al PSOE de utilizar el "miedo" para hacer las listas

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, acusó ayer al PP y al PSOE de utilizar el "miedo" para confeccionar las listas de candidatos a las elecciones municipales con "ciudadanos ajenos" al País Vasco. El dirigente nacionalista empleó la palabra "circo" para referirse al hecho de que el responsable del PSOE en materia autonómica, Ramón Jáuregui, encabece la lista de la localidad alavesa de Santa Cruz de Campezo, o que el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, figure de relleno en la lista del PP de Ondarroa. Arzalluz pregunto a Jáuregui si se presenta "para animar a los alaveses" o si hay una "operación política" para afianzar su "propia presencia en Madrid a cuenta de Álava".Arzalluz mantuvo ayer un encuentro con el coordinador federal de Izquierda Unida, Julio Anguita. El dirigente de la coalición de izquierdas giró una visita a Navarra y Euskadi en la que se entrevistó con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, con el líder de EA, Carlos Garaikoetxea, con Arnaldo Otegi (HB), y con el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz.

Anguita aseguró que el "problema vasco" es un problema político, amén de un "problema de Estado" de gran calado y dijo que el "Gobierno está obligado a cambiar". Para empezar, con el acercamiento de los presos de ETA. IU ha renunciado a estampar su firma en el cuadro resultante de la resolución del conflicto vasco y, en estas conversaciones, únicamente ha trasladado sus "reflexiones", que pasan por la creación de dos foros sin exclusiones, en Euskadi y Navarra, para avanzar en la resolución de un conflicto político "que dura más de un siglo". Propuesta que no ha encontrado detractores entre sus interlocutores políticos.

Las tres reflexiones de IU pasan por que "nadie tenga que abjurar de su pasado", por la "desaparición de la violencia de la vida diaria" y por que nadie ponga "límites previos". Anguita aseguró que ha coincidido en gran medida con el plan del lehendakari para encarar esta nueva fase, aunque admite las dificultades para canalizarla antes del 13-J. Por eso, abogó por recuperar las "técnicas" empleadas por los políticos durante la transición, en las que "no se pasaba revista sobre el pasado".