Los trabajadores de Astilleros cortan la carretera de circunvalación de Sevilla

Los trabajadores de Astilleros en Sevilla volvieron ayer a movilizarse y cortaron durante hora y media la SE-30, la vía que circunvala la capital andaluza. Los 400 trabajadores de la plantilla y 1.800 de las empresas auxiliares se reunieron en asamblea para proponer protestas por la muerte de un trabajador el pasado viernes en el astillero de Cádiz y reclamar cargas de trabajo que garanticen la continuidad de los centros.

El presidente del comité de empresa en Sevilla, Ignacio Sánchez, pidió mayores medidas de seguridad en todos los centros dependientes de Astilleros Españoles SA (AESA). El representante sindical denunció las "malas condiciones en las que tiene que trabajar el personal de las empresas auxiliares, ya que éstas, para ahorrar, prescinden de los vigilantes de salud laboral". Esta carencia provoca, según dijo, "continuos accidentes que, por fortuna, no son graves". El presidente del comité volvió a reclamar cargas de trabajo que aseguren el empleo una vez que se proceda a la botadura de los dos barcos que se construyen para el grupo británico Cenargo. El primero de ellos tiene prevista su botadura el próximo 15 de junio y a finales de año concluirán las labores del otro buque. Para evitar expedientes de regulación de empleo, los sindicatos consideran "imprescindible" que se realicen contrataciones de nuevos barcos. Ignacio Sánchez acusó a la dirección sevillana de "no hacer nada". "El director está calladito, ha perdido cualquier tipo de autonomía para hablar de barcos", señaló. Los empleados también cortaron ayer la SE-30 desde las 9.00 a las 10.30 y los accesos a la factoría hasta las 11.00, cuando volvieron al trabajo.