Un ciclo reúne en cuatro veladas a 12 cantantes de distinto signo

Un intencionado desliz gráfico, que no fonético, titula el ciclo Canta, autor, que inicia hoy domingo su segunda edición en el Colegio de Médicos de Madrid. Un desliz intencionado porque los doce artistas -todos hombres- que participan no son cantautores del todo, en el sentido estricto, pero tampoco se andan alejados del término según lo define el Diccionario de la Real Academia Española. Si algo les une es la diversidad, pues entre los 12 se conjugan variados géneros y estilos. Y también, aunque sólo sea por estos días, una puesta en escena común: fuera la electricidad y los decibelios, todos tocan en plan acústico.Cuatro veladas, a razón de tres artistas en cada una, conjugan el programa que se inicia hoy con la tanda más rockera de todas, al menos de origen. Iñaqui Glutamato (ex Glutamato Ye-ye), Nancho Novo y Enemigos son sus protagonistas. Rock de sabor madrileño y canalla, disparatado en unos casos y concienzudo en otro.

Continúa el martes, día 4, con el humor como punto de partida: allí estarán Pablo Carbonell, consagrado reportero de CQC; Pepín Tre, que por fin empieza a reconocérsele su valía, y la sorpresa última de los bares de Madrid, Riki López, un chaval con un humor muy inteligente y sutil que parece inventado por él.

Ismael Serrano

La tercera noche, el domingo día 9, los tres participantes sí responden en serio a lo de cantautor. Ismael Serrano, cantautor joven de rancio estilo es la estrella, pero no hay que desdeñar al israelí David Broza, sobre todo ahora que ha sido telonero de Van Morrison, ni al mallorquín Jaime Anglada, que acaba de publicar su segundo disco.La jornada final, la víspera de San Isidro, está dedicada a la comunidad argentina afincada en España. Sergio Makaroff repasará canciones de sus dos últimas geniales obras, Un hombre feo y Rico y Famoso; Andy Chango se sumergirá en el mundo tóxico de su disco sobre usos de las distintas drogas, y Andrés Calamaro mostrará una parte de las 37 canciones que ha registrado en su disco más doliente y de reciente aparición: Honestidad Brutal.

Dado el carácter anarco y bohemio de los doce artistas, es muy posible que cada día pase algo significativo. La buena onda que se supone que se da entre ellos puede provocar las improvisaciones y los deseos de tocar juntos fuera de programa.