Azkuna recalca que no está obligado a trasladar a Bilbao el pacto nacionalista

El candidato de la coalición PNV-EA a la alcaldía de Bilbao, Iñaki Azkuna, afirmó ayer que no está obligado a trasladar el acuerdo nacionalista de Gobierno al consistorio vizcaíno y que se encuentra está abierto a cualquier pacto. "No hay un pacto preformado", recalcó, antes de señalar que las únicas condiciones son la gobernabilidad y el programa. El ex consejero de Sanidad anunció que, si llega a ser alcalde, incrementará la vigilancia de la Policía Municipal para evitar el caos en el aparcamiento.

Azkuna inauguró ayer la Tribuna de Prensa de la Asociación de Periodistas Vizcaínos, por la que desfilarán los candidatos a la alcaldía de Bilbao. El aspirante de la coalición nacionalista anunció que en la campaña se centrará en los problemas de la capital vizcaína. "Voy a hablar de Bilbao y muy poco de Lizarra o Ermua y menos de los frentismos", dijo. Además, recalcó que su trabajo hasta las elecciones del 13 de junio se desarrollará "de la manera más serena posible, evitando los excesos verbales". Azkuna, quien aseguró que lleva una semana "pateando los barrios de Bilbao" y se comprometió a seguir circulando por la calle si consigue la alcaldía, abordó los futuros pactos, obligados si no existe un vuelco espectacular en los comicios. En Bilbao, una coalición nacionalista PNV-EA-EH es inviable ahora -suman 11 de los 29 ediles actuales- y las encuestas tampoco apuntan que puedan llegar a los 15 concejales. "No hay un pacto preformado", aseguró el aspirante nacionalista para negar que su partido le haya condicionado para un acuerdo concreto. [El diputado general de Vizcaya, Josu Bergara, apuntó horas después que el pacto en el Gobierno vasco puede servir de pauta también en este territorio, informa Europa Press. Bergara recordó que en la anterior legislatura se partía de un acuerdo en el Ejecutivo vasco que se plasmó luego en diputaciones y ayuntamientos. "No podemos descartar esa iniciativa", añadió]. El futuro de la Alhóndiga Sobre el problema del tráfico de Bilbao, donde en algunas calles los vehículos aparcan incluso en tercera fila, avanzó algunas de sus intenciones si llega a la alcaldía. "Hay que ser más coercitivo, con más vigilancia de la Policía Municipal", dijo antes de mostrarse favorable a la iniciativa convocada ayer en siete ciudades españolas de celebrar un día sin coches. El candidato nacionalista se mostró favorable al aumento de los aparcamientos disuasorios en la periferia para frenar la afluencia de automóviles a Bilbao. Azkuna ahondó en cuestiones como el proyecto de Abandoibarra o la remodelación del edificio de la Alhóndiga, que abordó el pasado lunes en la presentación oficial de su candidatura. A su juicio, la Alhóndiga, que está proyectada actualmente para la habilitación de un Palacio de Deportes con una inversión de 9.000 millones de pesetas y dispone para ello de una subvención del Gobierno central, debe tener también otros usos. Se mostró partidario del deportivo en la planta baja, pero defiende utilizar la primera planta para fines culturales, como una biblioteca, ludoteca, sala de exposiciones u otros servicios. En la presentación de su candidatura, apostó por una ciudad más verde y culta, que no se olvide de su industria y combine la regeneración urbana con la moral. "Trabajaremos para conseguir una ciudad que una a su fuerte personalidad unas dosis de amabilidad, más árboles y más verde si es posible", dijo.