Defensa de la Competencia multa a las azucareras con 1.475 millones de pesetas

El Tribunal de Defensa de la Competencia ha impuesto una multa de 1.475 millones de pesetas a las cuatro principales azucareras españolas (Ebro, Sociedad General Azucarera, Acor y Azucareras Reunidas de Jaén) por "acuerdos para la fijación de precios en 1995 y 1996 para el azúcar para uso industrial". Supone la mayor multa impuesta hasta ahora por el tribunal. La sanción se produce como consecuencia de una denuncia presentada por los fabricantes de chocolate, bebidas refrescantes, helados, turrones, galletas y caramelos en septiembre de 1996.

La resolución del Tribunal de Defensa de la Competencia, de fecha 15 de abril, considera que la fijación de precios entre las cuatro empresas que controlan el 100% del azúcar en España supone una seria restricción a la competitividad de estas empresas y que afecta a un gran número de consumidores por tratarse de productos de gran consumo. La multa se desglosa de la siguiente forma: 827 millones de pesetas a Ebro, 370 millones a Sociedad General Azucarera, 151 millones a Acor y 127 millones a Azucareras Reunidas de Jaén (ARJ). Cuando se inició la tramitación del expediente tras la denuncia de los fabricantes que utilizan el azúcar como materia prima en septiembre de 1996, se había producido la fusión entre Ebro y Sociedad General Azucarera. Eso quiere decir que la nueva sociedad Ebro Azucarera debe afrontar una multa conjunta de 1.197 millones.

La demanda, tramitada por el despacho de Uría y Menéndez, ha sido la que ha contado con un mayor respaldo de sectores empresariales implicados. No en vano más de un centenar de empresas del sector de producción de chocolate, de bebidas refrescantes, de helados, de turrones, galletas y caramelos, han unidos sus esfuerzos para romper una imposición de precios que consideraban abusiva.

Se estima que el consumo de este sector compra entre 200.000 y 300.000 toneladas de azúcar del total de 1,2 millones de producción anual.

La legislación de Competencia permite imponer una multa de hasta el 10% del daño económico producido por decisiones contrarias al libre ejercicio de la competencia empresarial, aunque las multas impuestas hasta ahora por el tribunal se sitúan en torno al 2%. En la demanda de los sectores industriales implicados existían otras peticiones al tribunal que no han sido atendidas por éste.

La pugna de los empresarios de la industria del dulce con las azucareras viene de largo. Sobre una producción media de azúcar de 1,2 millones de toneledas, unas 250.000 toneladas son adquiridas por industriales españoles en unas condiciones que eran consideradas negativas para el desarrollo de la competitividad del sector, tanto en el mercado nacional como en la entonces Comunidad Europea (CE) ya en el año 1991. Los estudios del sector reflejaban en aquella fechas que los industriales españoles pagaban el azúcar industrial un 20% más caro que lo hacía cualquier empresario de la Comunidad Europea. La Federación Española de Asociaciones del Dulce denunciaba ese año que el sector industrial pagaba el kilogramo de azúcar a 114 pesetas, cuando cinco años antes ese precio era de 95,3 pesetas y protestaba por la subida unilateral del precio.

Mayores multas

La multa impuesta por el Tribunal de Defensa de la Competencia es la de mayor cuantía que impone a un sector. Hasta ayer la mayor sanción económica se había impuesto a la Federación de Industrias Lácteas (Fenil), también por considerar que se habían puesto de acuerdo a la hora de fijar precios e ir en contra de la libre competencia. Esta multa, sin embargo, se repartió entre 49 empresas, y la actual, sólo entre cuatro. Las mayores sanciones individuales hasta la fecha eran las impuestas a Telefónica, de 760 y 580 millones, por imponer contrato de exclusividad a los distribuidores y por abuso de posición dominante. Ambas son de este año. Si se consideran los 827 millones de multa que recibe Ebro de manera individual, supera las dos de Telefónica.