La Guardia Civil detiene a Ynestrillas cuando pretendía entrar en Estella
El dirigente del partido ultraderechista Alianza para la Unidad Nacional (AUN) Ricardo Sáenz de Ynestrillas fue detenido ayer cuando intentaba llegar a Estella (Navarra) conduciendo personalmente una furgoneta con matrícula falsa y en cuyo interior la Guardia Civil halló un saco repleto de mangos de hachas, bolas de rodamientos, tornillos y cinco lanzabolas. La Guardia Civil detuvo también, tras una mañana de continuos escarceos, a otro ultraderechista e identificó a una veintena de seguidores que les acompañaban. Las dos furgonetas, aunque matriculadas en Madrid, llevaban placas falsas de Navarra. La detención, durante la que no se registraron incidentes, se produjo a unos cinco kilómetros de la localidad navarra de Estella.
Ynestrillas había convocado un acto, prohibido por la Delegación del Gobierno en Navarra, bajo el lema Recuperemos España. Ésta era la segunda ocasión en que Ricardo Sáenz de Ynestrillas pretendía dar un mitin en la localidad navarra donde los partidos nacionalistas suscribieron el Acuerdo de Lizarra (nombre en euskera de Estella). En su primer intento, Sáenz de Ynestrillas y su escaso grupo de seguidores fueron expulsados de Estella y se produjeron abundantes incidentes.
Un fuerte dispositivo policial -con presencia de decenas de guardias civiles y numerosos controles de carretera- se mantuvo durante toda la mañana de ayer en todos los accesos a Estella. Ynestrillas fue rechazado en varios de ellos y finalmente, detenido a cinco kilómetros de la población. Tanto él como sus seguidores fueron conducidos en furgones del instituto armado hasta el cuartel de la localidad de Los Arcos. Ynestrillas y su compañero detenido deberán comparecer durante el día de hoy ante el juez.
La Guardia Civil efectuó otro arresto en el centro de Estella, en la plaza de la Inmaculada, donde un numeroso grupo de personas participó en una contramanifestación que derivó en incidentes y finalizó con una carga con material antidisturbios. Los congregados profirieron gritos contra Ynestrillas y contra las fuerzas de seguridad.
