Un agente de la Guardia Civil tira al aire para detener a un fugitivo

Una patrulla de la Guardia Civil se vio obligada ayer a hacer uso de sus armas de fuego para detener a un ciudadano belga que, en compañía de otro compinche que no pudo ser detenido, había intentado robar en una caravana en el área de servicio de la autopista A-7 en L"Hospitalet de l"Infant (Baix Camp). Al recibir aviso del intento de robo, la Guardia Civil montó dos controles en la autopista en dirección a Valencia. Los sospechosos hicieron caso omiso de los controles, por lo que uno de los agentes, en el interior de L"Ametlla de Mar, se vio obligado a disparar al aire para forzarlos a detenerse. El aviso del intento de robo se produjo cuando un trabajador de la gasolinera del área de servicio de L"Hospitalet vio como los dos belgas pinchaban las ruedas a una caravana y se daban a la fuga en un Renault Megane que resultó ser alquilado. Los fugitivos rompieron una barrera del peaje de L"Ametlla y estuvieron a punto de atropellar a uno de los agentes del control. Una vez en el interior de la población, los dos belgas abandonaron el vehículo y emprendieron una carrera a pie. Fue cuando uno de los guardias que les perseguía decidió disparar dos tiros al aire para detenerles. Los tiros no ocasionaron daño alguno, informó la Subdelegación del Gobierno.