PAMELA, AL NATURAL, SIN IMPLANTES
Pamela Anderson Lee ha perdido voluntariamente algunas de las curvas que más dinero han generado en la historia de la televisión. Su portavoz, Marleah Leslie, ha confirmado que un médico de Los Ángeles ha retirado los implantes instalados hace años en los pechos de la actriz para dar lustre y esplendor a una figura que convirtió en un sueño deseable la posibilidad de estar a punto de ahogarse y ser salvado por Anderson con su minúsculo uniforme de vigilantes de la playa. Leslie asegura que no había "ningún problema con los implantes: Pamela sólo quería que su cuerpo volviese a su estado natural", sin aclarar cuáles son las medidas naturales de ese estado orgánico, sin aditivos, si bien es cierto que algunos se temen lo peor. Impasible ante la tristeza que puede provocar una decisión tan dramática, Anderson no teme que su aspecto desinflado merme una carrera que ha sido extrañamente poco aclamada por la crítica. El estreno de su nuevo cuerpo tendrá lugar en la entrega de unos premios en Mónaco el mes próximo.-
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