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Restos "mortales"

Hace unas semanas tuve ocasión de avanzar resultados de la encuesta electoral (efectuada entre noviembre y diciembre de 1998) que habían realizado los alumnos de Técnicas de Investigación de la Universidad de Alicante, con los excelentes periodistas J. Esquembre y E. Molto. La citada encuesta posee la cualidad metodológica que concede el hecho de que los encuestadores fuesen sociólogos que evaluaban continuamente el efecto que sobre la información tenía el trabajo de campo (estamos preparando un libro sobre la experiencia). El diseño muestral y de cuestionario fue asimismo académico. Con una muestra de 3.400 entrevistas, de ellas 1.200 correspondientes a la ciudad de Alicante, los estimados son bastante estables. Por otra parte, es conocido entre los analistas que las tendencias se definen mejor en las encuestas que se efectúan entre seis y nueve meses antes de la elecciones. En la citada conversación, les mencionaba que el PP aventaja en ocho puntos al PSOE en la provincia de Alicante y en seis en la ciudad de Alicante. Así como que EU experimentaba una pérdida espectacular de voto, aproximadamente el 20% de su electorado de 1995. Quedaba pendiente la asignación precisa de escaños y concejales, si bien se podía pensar que fuese favorable al PSOE mediante coaliciones. Las diferencias de voto entre el PP y el PSOE en 1995, recordemos, eran de 11 puntos a favor del PP en la provincia y de 12 puntos en las municipales de la ciudad de Alicante (20 puntos de diferencia entre PP y PSOE en el voto autonómico de la ciudad de Alicante; la distancia menor en municipales es atribuible al anterior alcalde del PSOE, Ángel Luna, que consiguió reducir en ocho puntos la mencionada diferencia). Por lo tanto, con los datos de la encuesta de noviembre-diciembre la distancia entre el PSOE y el PP se reduce en tres puntos para la provincia (de 11 a ocho) y seis en las municipales de Alicante (de 12 a seis). Un análisis más detallado destaca que esa observación empírica tiene argumentos a favor y en contra. En contra: la reducción en Alicante se apoya sobre bases inestables, como son la doble participación (participo en autonómicas y en municipales no) y el doble voto (voto una cosa en autonómicas y otra en municipales). Esto demora hasta el último momento la decisión. La intención de abstenerse, o incluso la indecisión de voto o participación son datos más estables para evaluar. La encuesta afirma la tendencia, pero la magnitud de la reducción de distancias se apoya sobre movimientos electorales que son demasiado abiertos. A favor: la Comunidad Valenciana tiene una expléndida tradición de doble voto y doble participación, como demuestra que la distancia de voto en la ciudad de Alicante en autonómicas entre el PP y el PSOE fue de 20 puntos y sólo de 12 en municipales (1995). Otro dato es la relación entre suelo y techo electoral, que es de 2.7 en el PP y de 1.6 en el PSOE. En resumen, la conclusión en términos electorales que comenté en su momento es la correcta: existe una tendencia de aproximación entre los resultados del PP y los del PSOE, articulada sobre una abstención selectiva basada en doble voto y doble participación. Pasemos ahora a comentar algo nuevo en relación a la mencionada encuesta. He tenido oportunidad de efectuar la distribución de escaños (provincia) y concejales (municipio) en Alicante, cosa que no había podido efectuar hasta el momento con la precisión adecuada. Y aquí entran las matemáticas electorales. El sistema proporcional adopta un comportamiento mayoritario en determinadas circunstancias, por ejemplo, cuando son dos los partidos que entran con fuerza en el reparto. ¿Recuerdan la pérdida de voto de EU? La consecuencia es convertir el sistema en cuasimayoritario, donde los restos del reparto benefician sistemáticamente al PP, dado que el PSOE no recoge en este momento el suficiente voto útil desde EU. Luego, aún cuando la ventaja electoral del PP sobre el PSOE se acorte, el PP puede obtener una prima notable en el reparto. ¿Qué reparto? Todos, concejales, diputados autonómicos y provinciales. Las matemáticas del reparto, junto a la situación electoral, donde el PSOE no se aproxima lo suficiente al PP, pueden hacer realidad los mejores deseos de Zaplana y Alperi. La encuesta plantea algo que E. Cerdán Tato resumió magníficamente mencionándola: parte del electorado del PP "ha perdonado" al PSOE, y existe una tímida transferencia de voto útil desde EU hacia el PSOE. Sin embargo, en este momento, las matemáticas no perdonan y se detecta que las mayores probabilidades de ganar las elecciones en Alicante están en el PP. Por los restos.

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