"La defensa debe ser de libertades y derechos, no de territorios"

José de la Torre fue el primer objetor de conciencia de Jaén. Corría el año 1983 y aún no había ley que regulara ese derecho. Por entonces estudiaba Teología y ya era un antimilitarista obstinado. Con estos antecedentes, no se conformó con no ir al cuartel, así que se metió a objetor fiscal, un movimiento del que es portavoz y que en Andalucía agrupa a unas 300 personas. P. ¿Qué es la objeción fiscal? R. Es una expresión más de la no colaboración con la estructura militar. Consiste en no participar en los impuestos destinados al militarismo detrayendo del IRPF un porcentaje equivalente al presupuesto del Ministerio de Defensa y a todo gasto militar. Defensa tuvo en 1998 un presupuesto de 897.000 millones, pero en total los gastos militares fueron más de dos billones porque hay que incluir, por ejemplo, los créditos para las industrias de armas. P. ¿Y para qué sirve? R. ¿Para qué sirve el gasto militar? Sirve para no colaborar con una estructura violenta. Nosotros propugnamos una defensa de derechos y libertades, no de territorios. El primer paso consiste en no colaborar económicamente con los gastos militares, pero debe haber un segundo paso, que es el de ofrecer alternativas. La no violencia si no va unida a la solidaridad no tiene sentido. Por eso, los recursos que detraemos de la declaración de la renta los destinamos a proyectos que creemos importante defender. P. ¿Cómo entiende la Defensa? R. La mejor defensa es el apoyo mutuo. Nosotros hablamos del transarme, que es armar de valores a la gente en vez de armarla con artificios que matan. P. Pero al objetar, infringís la legislación... R. Hacienda te envía una declaración paralela que corrige la que has hecho. Si es a devolver, te retiene el porcentaje que has desviado a otro proyecto y si es a pagar, como has pagado de menos, te quita de tu cuenta lo que falte. La desobediencia civil, la no colaboración deberían ser reconocidas como actitud política, no de cuatro grupos minoritarios, sino como comportamiento político legítimo. Esa es la asignatura pendiente de esta democracia formal. La disidencia debería estar reconocida, no castigada. No nos conformamos con una ley que nos reconozca como objetores fiscales, queremos que cambie el concepto de defensa. P. Pero hay cambios. Los militares participan en labores humanitarias... R. Se da el mensaje de que existe cooperación con el Tercer Mundo, de que la Defensa incluye labores humanitarias. Eso es un manto legitimador. España ha pasado del décimo al quinto puesto en venta de armamento, ha creado oficinas para la venta de armas en el sudeste asiático, una de las zonas donde menos se respetan los derechos humanos.