Joan Manuel Serrat: "En la vida prefiero pasar miedo que vergüenza"
La imagen de Joan Manuel Serrat sonríe a todas horas a los paseantes barceloneses desde la infinidad de banderolas que pueblan la ciudad anunciando sus conciertos en el recién inaugurado Auditori. Una sonrisa de amplia satisfacción que ya no aspira a conseguir más adeptos porque no queda absolutamente ninguna entrada para estas actuaciones, que se inician hoy y continúan los días 6, 7, 8, 12, 13 y 14 de abril. En total, más de 15.000 barceloneses acudirán al nuevo equipamiento cultural de la ciudad para asistir a la presentación oficial de Sombras de la China, último disco del cantautor.
"Estoy muy orgulloso por la confianza y complicidad de mis conciudadanos", explicó Joan Manuel Serrat antes de confirmar que los conciertos que hoy empiezan no se limitarán tan sólo al nuevo material de ese disco recién aparecido. "Además de las nuevas canciones recuperaré una serie de temas mayoritariamente en catalán que cubren desde mi primera época hasta otras más recientes. Un puñado de canciones conocidas para conseguir que el concierto camine de forma más ligera y amena y se supere la dificultad de presentar sólo canciones que el público aún no conoce". El de Serrat será el primer recital de canción que se presente en el nuevo Auditori. "Todavía no conozco el Auditori, lo veré por primera vez mañana [por hoy] durante las pruebas de sonido", afirmó. Serrat será el primero que incluirá algo de escenografía para mejorar la frialdad del gigantesco escenario. "Un espacio así ha de tener siempre un problema porque es muy difícil conseguir que convivan tipos de música con necesidades tan diferentes. En mi caso utilizaré una serie de proyecciones muy sencillas que espero que ayuden a conseguir la intimidad necesaria". Esa búsqueda de la intimidad no es casual en Joan Manuel Serrat. "Mi música siempre ha podido ser catalogada de intimista en el sentido que es necesario escucharla intentando introducirse en el texto. Me considero un artista intimista porque mis canciones favorecen el matiz y el gesto. En ese aspecto puede ser tan íntimo un teatro de 350 plazas como el de Zamora, en el que canté hace unos días, como una plaza de toros. Los únicos locales que no considero aptos para la música son los polideportivos, que se han pensado para hacer deporte y ni siquiera siempre sirven para eso". Serrat no podrá prorrogar sus conciertos barceloneses ni una sola noche. "El Auditori tiene sus compromisos y yo tengo los míos, pero espero volver a Barcelona para las fiestas de la Mercè, aunque todo depende de lo que pase de aquí a septiembre. De todas formas, me gustaría que se pudiera hacer gane quien gane las elecciones". Mientras Joan Manuel Serrat esté cantando esta noche en el flamante Auditori, las bombas de los ejércitos de la OTAN, España incluida, estarán cayendo sobre zonas de la ex Yugoslavia. "No sólo me afectará esta noche, me está afectando desde el momento en que me enteré. No sé si somos conscientes de que estamos en guerra. Desde hace 60 años este país no había estado en guerra y ahora lo está. Nunca podré entender que el camino de la paz pase por la guerra". Sobre el caso Pinochet Serrat se mostró mucho más irónico. "Estoy muy contento de que todos se hayan quedado contentos con el fallo de los lores. Esta es una situación que sólo la había visto después de unas elecciones, cuando todos parecen haber ganado. Para mí la cosa está en el mismo punto en el que estaba, pero mucho más disminuida". Serrat tiene previstas varias actuaciones en Chile para finales de junio. "No tengo miedo. De aquí a entonces pasarán muchas cosas y no quiero darle ideas a nadie. De todas formas, en la vida prefiero pasar miedo que vergüenza".
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