Beatriz Carvajal y Ramón Langa luchan en 'Misery', de Stephen King
Es la obra favorita de Stephen King, escritor afamado mundialmente, cuyas populares novelas suelen ser llevadas al cine con igual éxito. Buena prueba de ello es que Misery, que se representa desde hace años en numerosos países de Europa, no se ha estrenado aún en Nueva York, ciudad natural de esta obra, porque el propio King quiere encargarse de la puesta en escena y aún no ha encontrado un hueco en su agenda. Para lo que sí quiere encontrar un hueco es para venir a ver la representación que ha adaptado y dirigido Ricard Reguant, con los actores Beatriz Carvajal y Ramón Langa, que hoy se estrena en el teatro Bellas Artes con una producción de Enrique Cornejo, al que literalmente ha empujado su hijo Alain, incorporado de lleno en su mismo oficio, y especialmente interesado por subir a los escenarios obras para un público joven.Para la venida de King, el célebre autor tendría que vencer su natural miedo a los aviones, una fobia que compartía con Joseph Losey y Alfred Hitchcock, dos grandes del género que él toca, ya que en sus novelas el terror y la tensión lo llenan todo. Misery desborda intriga por todos los costados, tanto en la novela primigenia como en la posterior película en la que Rob Reiner eligió a James Caan y Kathy Bates (que ganó un oscar por su trabajo) como protagonistas.
En teatro no se ha quedado atrás. De hecho, éste ha sido el gran triunfo escénico de King, y en España vamos a ver una adaptación tan cuidada que los cambios que se dan con respecto a la versión teatral inglesa, realizada por Simon Moore, han sorprendido tan favorablemente al autor que los quiere incorporar a su versión neoyorquina.
Miedo en el patio de butacas
Tanto Reguant como los actores señalan que esta obra es una de las pocas piezas teatrales en las que el miedo puede ser transmitido a los espectadores. "Lo que se da aquí es mucha tensión, un terror psicológico que te envuelve de manera especial", dice Carvajal, quien representa el papel de la enfermera que recoge a un accidentado, su escritor favorito, al que en principio trata de curar. "La angustia que pasa el personaje masculino cuando se va viendo atrapado por la psicópata termina compartiéndola con los espectadores", dice la actriz, a la que han esperado algo más de un año para que terminara sus compromisos y pudiera incorporarse a este montaje. También hubo que esperar por Ramón Langa, al que escogieron no sólo por sus dotes interpretativas, sino por esa sugerente voz que ha prestado en ocasiones a actores como Bruce Willis, James Caan o Jack Nicholson, entre otros, ya que se pasa la primera parte de la obra en la cama y necesitaban que su voz tuviera una fuerza inusual.
Misery. Teatro Bellas Artes. Marqués de Casa Riera, 2; metro Banco. De 2.000 a 3.000 pesetas.
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