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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Juicio a un parado

Al leer y oír en varios medios de comunicación sobre el juicio celebrado en Madrid de un parado de larga duración y sin ingresos económicos que provocó un incendio en la oficina del Inem de la calle del General Pardiñas en Madrid y sobre la opinión que dieron de él en el juicio de que es un hombre orgulloso y cobarde porque no pide limosna y no roba, quiero expresar mi opinión sobre el tema.Sólo digo que dónde están esos conocidos personajes solidarios de la baba y de mierda que salen por televisión lanzando la palabra solidaridad; dónde están esos conocidos personajes políticos, sobre todo de izquierdas y sindicalistas, que sí que son cobardes todos ellos por no pregonar o incitar, con su nombre y apellidos, a los solidarios, a los trabajadores con trabajo y estudiantes, etcétera, a que salgan a la calle a apoyar a los parados para robar en los bancos, a robar comida en los grandes almacenes y superficies, a no pagar en los medios de locomoción.

¿Qué es la fe y la esperanza?

El paro nunca se solucionará, ya que es de capital importancia que exista mucho paro para tener la garantía de mano de obra barata y exigencias al Gobierno por parte de la banca y empresarios.

Yo, que soy también un parado de 50 años, que llevo en esta situación más de cuatro años, casado, con tres hijos y que tampoco tengo ningún ingreso económico, ya que la miseria de las 51.030 pesetas al mes que cobraba del subsidio de desempleo se me terminó el 19 de agosto de 1998, y estoy completamente abandonado a mi suerte, como me imagino que estamos muchos como yo, ya que el Gobierno nos tiene completamente abandonados a los de mi caso. Incluso también estoy pensando y planeando ciertas cosas, ya que, por lo que se ve, es mejor robar en este país de ladrones.

Viva las personas humildes y buenas, viva esos voluntarios de ONG y Cáritas que trabajan de corazón en ayudar a los más necesitados y viva la clase trabajadora humilde que, gracias a su esfuerzo y trabajo, dan de comer a tantos sinvergüenzas de este país.-

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