Acuerdo entre Indonesia y Portugal para un referéndum en Timor Oriental

Kofi Annan, secretario general de Naciones Unidas, anunció en la madrugada de ayer que Indonesia y Portugal han llegado a un acuerdo para que los habitantes de Timor Oriental decidan en votación directa si quieren autonomía o independencia. Al tiempo, independentistas y proindonesios anunciaron que dejan de lado las armas. Así lo dio a entender el jefe de la resistencia timorense, Xanana Gusmao, al celebrar el principio de acuerdo alcanzado entre Yakarta y Lisboa.

Kofi Annan señaló que "las modalidades específicas sobre cómo se llevará a cabo la consulta popular" no están aún resueltas. Para ello, Portugal e Indonesia volverán a reunirse dentro de un mes en Nueva York."El acuerdo sobre el método de consulta respeta los principios democráticos, a la vez que reafirma la disposición de Indonesia de llevar a cabo la reforma", indicó Gusmao desde su residencia especial en Yakarta, donde cumple una condena de 20 años de cárcel por conspiración contra el Estado. Más cauto que Gusmao se mostró el itinerante dirigente timorés José Ramos Horta, laureado con el Nobel de la Paz en 1996, quien advirtió de que la votación directa carecerá de sentido si el Ejército no se ha retirado antes del territorio. Ramos Horta declaró desde Sydney (Australia) que lo mejor es la fórmula "un hombre, un voto" para "todos los timorenses", excluidos los colonos llegados en los últimos años, en una votación que "sólo será aceptable si es bajo supervisión internacional y sin la amenaza militar de Indonesia".

Los dirigentes independentistas de Timor Oriental reclaman que el 90% de la población de la ex colonia portuguesa está a favor de romper con Indonesia, país que invadió el territorio en 1975 y se lo anexionó al año siguiente, sin que hasta ahora haya contado con el reconocimiento de la ONU. La población de Dili, capital de Timor Oriental, acogió la noticia del acuerdo con una mezcla de alegría, cautela y temor ante el posible incremento de la violencia si la votación se celebra antes de la retirada del Ejército.