El militante de Jaén que denunció el pucherazo se ratifica en la investigación

Manuel Aguilar, el militante socialista de Jaén que denunció un pucherazo en las elecciones primarias del PSOE, se ratificó ayer en su acusación ante la instructora de la comisión federal de garantías, Consuelo Álvarez, que se desplazó a la capital jiennense para tomarle declaración. Aguilar afirmó tras su comparecencia que confía plenamente en la instructora, aunque añadió que el partido ha cerrado este caso en falso porque sólo se le ha culpado a él. "Si hubieran sancionado en la medida que a cada uno le correspondía no se hubiera armado tanto jaleo. No es lo mismo el que dio la orden que el que la ejecutó", dijo Aguilar, quien entregó a la instructora el censo de la Agrupación Sur en la que se cometieron las irregularidades. "Me he ratificado plenamente en la denuncia, en lo que dije en el escrito remitido al partido y lo que he declarado ante los medios de comunicación", sentenció Aguilar, que acudió a la cita con su abogada Elena Parras, quien finalmente no pudo asistirle en su declaración. Por su parte, el secretario de Organización del PSOE de Jaén, Francisco Reyes, aseguró que el denunciante incurrió en varias contradicciones respecto a su denuncia inicial, según le había indicado la instructora. La comisión federal de garantías ya dio por zanjado este caso culpando de la introducción de papeletas a favor de Joaquín Almunia a Manuel Aguilar -quien de antemano se había autoinculpado- y abriendo un expediente a la presidenta de la mesa. La resolución se cerró sin que se escuchase a Aguilar, quien no acudió a declarar en Madrid argumentando que no había sido citado. Manuel Aguilar ha sido expulsado provisionalmente del partido tras la investigación de la comisión federal de garantías. "No soy ex militante, todavía está abierto el caso", matizó ayer Aguilar. La instructora tendrá ahora que realizar un informe para remitirlo a la ejecutiva federal. Si la resolución final lleva a su expulsión definitiva, Aguilar aseguró ayer que llevará el caso a los tribunales. "Allí ya no es una comisión la que habla, sino un juez atendiendo a documentación", dijo. El consejero de Presidencia, Gaspar Zarrías, principal responsable del pucherazo, según Aguilar, presentó en un juzgado de Jaén una querella por injurias, que ha sido admitida a trámite.