Peculiaridades
DE PASADAEn torno a cien periodistas venidos de toda España asistieron a la presentación, el martes, en Córdoba, de la nueva novela de Antonio Gala. Allí estaban las firmas más prestigiosas y habituales de las secciones de Cultura de los medios nacionales. Mucha expectación, y mucho dinero invertido por la editorial Planeta en el lanzamiento del nuevo libro de Gala. Al nacimiento de Las afueras de Dios, que así se llama la novela, no faltaron los próceres locales: el alcalde, Rafael Merino; el subdelegado del Gobierno, José Antonio Linares; y, por supuesto, el presidente de Cajasur y patrocinador de la Fundación Gala, Miguel Castillejo. Los dos primeros se sentaron con la canalla, en el patio de butacas; el último presidió el acto junto al escritor. Cosas del mecenazgo. En la tribuna estaba tambien la ex ministra de Cultura Carmen Alborch, quien estos días recorre tambien España promocionando su libro Solas. Por cierto que la ex ministra provocó el desconcierto de los camareros de las Bodegas Campos, lugar elegido para nutrir a la comitiva. La Alborch abandonó el ágape antes de los postres. Pidió que avisaran a un taxi. El chófer no daba crédito a sus oídos cuando tan eminente señora le dijo que no iba a pagarle las 1.305 pesetas de la carrera, que volviera a las bodegas y preguntara quién corría con el gasto. Ante la insistencia de la ex ministra, el taxista no tuvo más remedio que desandar el camino. Allí, los camareros no sabían nada. El conductor se subía por las paredes, el taxímetro ya marcaba 1.915. Finalmente, el buen hacer del maitre del restaurante de Javier Campos arregló el problema: carrera pagada y asunto concluido. Otra anécdota se produjo cuando el escritor atendió las preguntas de los comensales. En una de sus respuestas, Gala explicó su particular visión de Dios. Juntó a él, Castillejo escuchaba atento. Un redactor se disponía a plantear una nueva cuestión al poeta, cuando el presidente de Cajasur se hizo con el micro y abundó en el problema teológico. Los forasteros, sorprendidos, no entendían nada: según la documentación de Planeta, si aquel señor era el presidente de la caja de ahorros de Córdoba, ¿a qué venían tales disquisiciones en boca de un banquero? Nadie les había explicado su condición de sacerdote. Peculiaridades cordobesas. ANTONIO FERNÁNDEZ
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