El jardín de la discordia
Un barrio mostoleño se divide a favor y en contra de un vecino que sembró plantas en una plaza
La colonia Guadalupe, de Móstoles (196.500 hab), vive días inquietos. Trescientos vecinos se enfrentan a otros doscientos, a golpe de recogida de firmas, para mantener o destruir, respectivamente, el jardín que con permiso municipal plantó un bombero, José Esteve, hace dos años. En medio de la gresca, al Ayuntamiento le llueven los escritos de unos y otros, y el grupo ecologista Los Verdes tercia en la polvareda advirtiendo de que "alguien quiere apropiarse de ese espacio público para hacer aparcamientos".La polémica estalló hace dos semanas, cuando el presidente de la asociación vecinal, Antonio Granados, acusó a Esteve ante la policía municipal "de plantar tomateras" en una plaza situada en una zona privada, aunque de uso público, entre los bloques de la colonia Guadalupe. Según Granados, este "huerto" impide el asfaltado total de la plaza, en remodelación, por lo que el concejal de Urbanismo, Ildefonso Fernández, de IU, anunció un decreto para destruirlo. Ante esta posibilidad, unos 300 residentes en el barrio han reaccionado como un sólo hombre aportando sus rúbricas para que el jardín no se toque. "Aquí no hay tomateras, sino rosales y otras plantas decorativas, y yo, por razones obvias, no he plantado nada", arguye José Esteve, en silla de ruedas tras un accidente laboral en 1997. El embrión de la discordia data de unos meses antes, cuando este bombero consiguió un permiso municipal para decorar con plantas el páramo que existía en la parte trasera del inmueble donde vive. "La comunidad de vecinos autorizó el jardín y me gasté 200.000 pesetas en montarlo cuando el consistorio me dio permiso", rememora. Pero poco después, las bocas de riego sufrieron una sequía súbita. "Nos cortaron el agua sin ninguna explicación durante medio año y las plantas se secaron", explica Esteve, que por aquel entonces ya estaba postrado en una cama del hospital. Los vecinos trataron en vano de arrancar al Ayuntamiento una ayuda para repoblar el terreno.
Así que todo quedó en barbecho hasta que, casi un año más tarde, el bombero volvió a casa y anunció una nueva siembra, otra vez a cargo de su bolsillo. Cuando Esteve comentó que iba a gastarse 100.000 pesetas en piracantas (árbol cuyas hojas se asemejan a las tomateras) volvió la bronca. Ahora ansía que jamás llegue el decreto de destrucción del jardín, "en cuyos cuidados colaboran los niños del barrio".
Según Esteve, sus discrepancias con el denunciante se deben al enfrentamiento que ambos mantuvieron cuando nació la asociación de vecinos, que el propio bombero fundó y fue tesorero después de salir del hospital. Cuando regresó a casa, Granados ostentaba ya la presidencia del colectivo, por lo que dejaron a José el cargo de tesorero. "Quise estudiar a fondo los movimientos económicos de los últimos meses, pero me lo impidieron porque el presidente montó una junta para destituirme y poner a gente de su cuerda en los principales cargos de la asociación", critica Esteve.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Asesinado a balazos un exinspector de la Fiscalía de Sinaloa en Culiacán
Trump exagera en un discurso a la nación los logros de su primer año y culpa a Biden de la marcha de la economía
La Cámara de Representantes rechaza dos propuestas para impedir a Trump lanzar un ataque unilateral contra Venezuela
Los campesinos amagan con revivir las protestas en México por los precios de las cosechas
Lo más visto
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano
- Víctor Manuel, músico: “El capital tiene que rectificar, nunca pensé que fueran a ser tan voraces”
- Carlos Alcaraz y Ferrero rompen tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos”




























































