Botafumeiro para el Celta en Marsella
El club gallego, recibido entre grandes elogios, llenará hoy el estadio Velódromo
El técnico del Celta, Víctor Fernández, es "uno de los mejores, si no el mejor entrenador de España", según su colega del Olímpico de Marsella, Roland Courbis. El equipo gallego está al mismo nivel "que el Parma o el Bolonia", también cuartofinalistas de la UEFA, en opinión de Fabrizio Ravanelli, el goleador italiano del Olímpico, mientras que Mazinho es ni más ni menos que "el hijo de Dios", en hiperbólica definición de la revista oficial del club galo. Tras sus exhibiciones ante Liverpool y el Aston Villa, el Celta infunde un gran respeto en toda Europa, y Marsella acogió al cuadro gallego con las más sonoras alabanzas en vísperas de la eliminatoria que se abre esta noche en el estadio Velódromo (21.15, TVE1 y TVG). El Celta reanuda hoy su aventura europea, que en apenas cuatro meses le ha labrado un súbito prestigio y ha enloquecido a la afición viguesa. Los últimos tropiezos en la Liga han propiciado que las mayores ilusiones del celtismo se vuelquen otra vez en Europa. Hasta la portuaria y multirracial ciudad francesa van a llegar 2.000 aficionados gallegos.La presencia de Makelele, lesionado, es dudosa, y tal vez no pueda lucirse hoy en el estadio donde jugaba hasta la pasada campaña, lo que sin duda mermará el poderío físico del centro del campo vigués. Hasta el último momento, Víctor Fernández tampoco sabrá si puede contar con Berges.
Las ausencias dejan el campo abierto a la especulación. Tal vez el técnico vuelva a probar con un sistema de carrileros y tres centrales, lo que puede proporcionarle solidez defensiva a costa de perder presencia en los costados. Con esta fórmula el Celta ha obtenido resultados desiguales, por lo que también es posible que Fernández se decida a mantener una línea defensiva de cuatro hombres y, en ausencia de Makelele, situar a Karpin como escudero de Mazinho en el medio centro. En teoría, el Celta parece más interesado en la UEFA que el Olímpico de Marsella, ya que su adversario está pugnando también por el campeonato nacional en un duelo muy igualado con el Girondins de Burdeos. Acaba de recuperar el liderato. Olvidada la época de éxitos y corruptelas bajo la presidencia del ex ministro socialista Bernard Tapie, que condenó al equipo a un descenso a Segunda por decisión administrativa, el OM, como lo llaman sus aficionados, aspira a erigirse de nuevo en la principal referencia del siempre irregular fútbol galo. Los nuevos dirigentes han reunido una plantilla en la que figuran futbolistas de prestigio, algunos bien conocidos en España, como los citados Blanc y Ravanelli, el también ex azulgrana Dugarry, el centrocampista Pires y el goleador Maurice. El OM tuvo un comienzo de temporada fulgurante, pero ha decaído en las últimas semanas.
O. de Marsella: Porato; Blondeau, Blanc, Domoraud, Gallas; Pires, Roy, Dugarry, Luccin; Ravanelli y Maurice.
Celta: Dutruel; M. Salgado, Cáceres, Djorovic, Berges; Karpin, Mazinho; Sánchez, Mostovoi, Revivo; y Penev.
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