El juez archiva el caso de la profesora de inglés descuartizada en Vitoria

El juez que instruye la causa por el asesinato de la profesora descuartizada en Vitoria en mayo de 1998 ha archivado el caso dado que la investigación policial ha llegado a un punto muerto. La Ertzaintza no ha logrado avanzar en sus averiguaciones, pero continuará con sus pesquisas para tratar de dar con alguna pista que le permita aclarar el misterio del asesinato de Esther Areitio, de 55 años, y detener a su autor o autores.

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Vitoria, Jesús Pino, ha optado por el archivo de las diligencias al constatar que las líneas de investigación abiertas por la Policía vasca no han dado frutos desde que el cadáver de Areitio fuese encontrado. Los empleados municipales que se encargan de la limpieza de Vitoria descubrieron a las 5.15 de la madrugada del pasado 8 de mayo el cuerpo descuartizado de la profesora de inglés repartido en seis bolsas de basura. El asesino o asesinos robaron varias joyas de la casa de Areitio y utilizaron sus tarjetas de crédito. Precisamente, una cámara de vídeo instalada en una sucursal bancaria grabó la imagen de una de las personas que sacó dinero con esas tarjetas. La Ertzaintza elaboró un retrato-robot, que, de momento, no ha servido para detener a nadie. El archivo del crimen de la profesora se produce después de que el juez haya decidido también archivar las diligencias abiertas por el asesinato de Acacio Pereira, un hombre de 77 años que fue hallado maniatado y apuñalado el 9 de junio pasado en su casa. Ciudad conmocionada La capital alavesa se vio conmocionada en los primeros meses de 1998 por cuatro brutales asesinatos, una circunstancia completamente desconocida en Vitoria, que sembró el desconcierto entre los investigadores y la alarma entre la población, sobre todo entre los vecinos de las víctimas. A los crímenes de Areitio y Pereira hay que añadir los del anticuario Ángel Quintana y del empresario de máquinas tragaperras, Agustín Pérez, que siguen abiertos judicialmente. El único caso en el que se ha avanzado de manera sustancial es en el del anticuario. La Audiencia Provincial de Vitoria se prepara para acoger en los próximos meses el juicio por el asesinato. Según indican los investigadores, hay pruebas suficientes para implicar al único imputado, que permanece ingresado en la cárcel de Nanclares de Oca. El acusado fue detenido a los pocos días de cometerse el crimen en Arévalo (Ávila), donde regentaba una tienda de antigüedades.