Sacchi deja el Atlético

Arrigo Sacchi deja el banquillo del Atlético, aunque hasta la mañana de hoy no se hará oficial. En realidad, el club decidió la salida del técnico el mismo sábado, inmediatamente después de la derrota del equipo ante el Espanyol (1-2), en la que el público pidió abiertamente la marcha del italiano. El Atlético comunicó sus intenciones al entrenador esa misma noche, al tiempo que le instó a renunciar a parte de sus derechos económicos -el contrato, que concluía en junio del año 2000, incluye, al margen de los 350 millones de pesetas por temporada, una cláusula de 200 millones de pesetas en concepto de indemnización ante una posible destitución-. Ambas partes, en una reunión celebrada al mediodía de ayer entre el entrenador y Miguel Ángel Gil Marín, director general del Atlético de Madrid, alcanzaron un acuerdo para la rescisión. En él, efectivamente, Sacchi libera al Atlético de parte de sus compromisos. "Sacchi lo quiere dejar", aseguró ayer Miguel Ángel Gil a este periódico, sin querer dar por definitiva en ningún caso la marcha del técnico. "Quiere irse por voluntad propia, alega motivos personales, la presión que está sufriendo. Ya me lo manifestó ayer [por el sábado], me ha insistido hoy [por ayer] y mañana [por hoy] volveremos a reunirnos. En ningún caso habrá indemnización". Otras versiones, sin embargo, insisten en asegurar que no se trata de una dimisión, sino de un destitución.

Carlos Sánchez Aguiar, el entrenador del filial, cogerá el equipo, en principio de forma provisional. Su primer compromiso será el miércoles: de nuevo ante el Espanyol y en el Vicente Calderón, aunque en esta ocasión correspondiente a la Copa del Rey. El Atlético, mientras, estudia los entrenadores que están disponibles en el mercado. Sabe que no tiene mucho donde elegir. La opción Radomir Antic, la que reclama el público, es difícil que prospere: el club buscó con Sacchi un proyecto que enterrarra cualquier recuerdo a Antic y, a la vez, el entrenador serbio ha comentado con rotundidad entre sus amistades que no volverá jamás al Atlético, "ni aunque Gil lo pida de rodillas". La candidatura de Aguiar, que ya cogió con éxito el primer equipo en dos cortos periodos anteriores, es la más sólida para suplir a Sacchi, al que sólo un milagro podría mantener en el cargo.

Con todo, hasta que la rescisión del italiano no esté firmada nadie quiere pronunciarse públicamente. Ni la gente del club, ni la cercana al entrenador. Para hoy está prevista una reunión en el Vicente Calderón con el técnico a la que tiene previsto asistir Jesús Gil, el propietario del Atlético. El dueño del club, según informa Europa Press, tampoco quiso confirmar el cese de Sacchi. "Hemos estado hablando con él", se limitó a decir, "y sólo hablamos con los que tenemos algún problema. Hoy nos reuniremos otra vez, y Sacchi dirá lo último que tenga que decir".

La retirada

Los últimos resultados del equipo -cuatro derrotas consecutivas, una racha negativa que los rojiblancos no padecían desde 1995- y, sobre todo, el divorcio evidente de la afición, que llevaba semanas pronunciándose claramente en contra del técnico, acabaron con el primer proyecto de Arrigo Sacchi fuera de su país. Sacchi deja exactamente el cargo, y probablemente también el fútbol profesional, un día después de cumplir la treintena de partidos oficiales con el Atlético, 22 de Liga, seis de Copa de la UEFA y dos de la Copa del Rey. El balance, especialmente en la Liga, es más bien discreto: nueve victorias, cinco empates y ocho derrotas, lo que le sitúan a 11 puntos del líder. Deja más vivo al equipo en las otras competiciones, en cuartos de final en ambas. En la Copa de la UEFA, después de superar tres rondas (ante el Obilic, el CSKA de Sofía y la Real Sociedad), y en la del Rey, tras una eliminatoria (también ante la Real Sociedad). No es la primera vez, en cualquier caso, que Arrigo Sacchi ha estado a punto de dejar el Atlético. Ya meditó la dimisión en la pretemporada, cuando la fuga de Vieri al Lazio y la inmediata comprobación de que el club no pensaba cubrir su baja con un futbolista de sus características. Más adelante, tras la derrota del equipo en Mallorca (4-0), el preparador italiano, como confesó unos días después, deprimido porque veía que sus jugadores no avanzaban en la comprensión de su sistema, se planteó dejar el cargo.

Arrigo Sacchi ya no acudió ayer al entrenamiento del primer equipo en Majadahonda. La sesión estuvo dirigida por Pietro Carmignani, el segundo entrenador, Vicenzo Pincolini, el preparador físico, e Italo Grazziani, un ayudante. Ninguno de los tres quiso hablar sobre el futuro de su jefe y el suyo propio. De hecho, los contratos de los tres es otro de los problemas que tiene que resolver el Atlético. Podrían quedarse hasta la conclusión de la temporada, pero lo normal es que abandonen el club junto a quien les trajo.

Sí hablaron alguno de los miembros de la plantilla. Por ejemplo, Jugovic, que dejó en manos del club este tipo de decisiones, pero se pronunció en favor de la continuidad del preparador italiano: "Lo normal es que hubiera seguido. No me gusta hablar de cambios de entrenador".

También se deshizo en elogios hacia Arrigo Sacchi el jerezano Kiko, quien declaró en la Cope: "Me ha enseñado en cinco meses, más que todos los demás en siete años".