Diez muertos por un alud que arrasó un pueblo de los Alpes franceses

Al menos 10 personas, todas francesas, han muerto sepultadas por la avalancha de nieve que se desató el martes por la tarde en la comarca de Chamonix. Los equipos de salvamento trabajaron ayer denodadamente en el intento, desesperado, de rescatar a dos desaparecidos identificados y a otros más que pueden haber quedado atrapados bajo las masas de nieve. La avalancha, la más mortífera de las desatadas en este valle alpino, se produjo a primera hora de la tarde. Un gigantesco muro de 200 metros de largo y 10 de alto que viajaba silenciosamente a unos 100 kilómetros por hora asomó de improviso sobre la cresta de la montaña, atravesó un bosque y ocupó el valle en toda su extensión, antes de remontar sobre una de las laderas y arrasar 17 chalets en el área de Tour.Tras el impacto, que desplazó las construcciones decenas de metros, la masa de nieve en polvo enterró por entero la mayor parte de las casas y en ellas a sus habitantes. El milagro al que siguen invocando los equipos de salvamento y los voluntarios que luchan contra los elementos a 2.000 metros de altura se produjo en la madrugada de ayer con el descubrimiento de un niño de corta edad que había sobrevivido a largas horas de encierro bajo varios metros de nieve.

Por su parte, el Ejército de Austria ha tenido que establecer un puente aéreo con helicópteros para facilitar víveres a miles de turistas que han quedado atrapados en las regiones de Tirol y Vorarberg, informa Efe.