Los careos del Tour
El sumario sobre el "caso Festina" saca a la luz los productos del dopaje sistematizado
Uno de los elementos más ricos del sumario del caso Festina es la transcripción del careo que mantuvieron ante el juez Keil el 15 de octubre de 1998 dos de los principales encausados -Willy Voet, masajista del Festina, y Eric Rijckaert, médico del equipo- con Richard Virenque, el líder del equipo, un corredor que en ningún interrogatorio ha admitido haber recurrido a sustancias dopantes. Pregunta del juez a Virenque. Usted recibe un salario mensual de 700.000 francos , ¿debemos por ello considerar que es usted el líder del Festina?Respuesta. Sí, colíder, con Dufaux y Zülle.
P. ¿Cuál es su postura acerca del dopaje?
R. Estoy en contra.
P. Durante su interrogatorio el 23-7-98, usted declaró no haber pedido nunca productos dopantes. ¿Lo mantiene?
R. Sí.
P. ¿Se le ha propuesto alguna vez tomar productos dopantes en el seno del Festina?
R. No.
P. ¿Su respuesta abarca las anfetaminas, los corticoides, los anabolizantes, los productos con cafeína, las hormonas de crecimiento, la eritropoietina, el Eprex, el Neo Recormon?
R. Sí.
P. Durante el interrogatorio policial, usted declaró que si se había dopado alguna vez había sido engañado. ¿Mantiene esa declaración?
R. Es difícil doparse sin darse cuenta. Cuando el doctor Rijckaert me ponía inyecciones, él rompía la ampolla delante de mí. A lo largo de los años ha crecido la confianza entre nosotros y yo sabía lo que contenían esas ampollas. Se trataba de vitaminas, de productos de recuperación (especialmente Tationyl coenzima, prefólico, ferritina, vitamina B12). No he hecho estudios de medicina, pero esos medicamentos los conozco, ya que los veo a menudo.
P. ¿Quién podría ponerle inyecciones de productos dopantes engañándole?
R. Nadie.
P. Durante su declaración a la policía, usted afirmó que en sus conversaciones con el doctor Rijckaert usted le pidió permanecer en la cima de su deporte y que de ahí dedujo que él pudo pensar que usted le daba luz verde para que administrara productos dopantes. ¿Mantiene esa declaración?
R. Esas afirmaciones han sido un poco deformadas por la presión para hacerme decir lo que no pensaba. Yo quería decir que el doctor Rijckaert debía seguirme para evitar que yo cayera enfermo. Incluso si ahora estoy orgulloso de lo que hago, sé que hay una vida después de la bicicleta y que no tengo ganas de estar a los 30 o a los 40 años entre cuatro maderos.
P. ¿Qué interés tendría nadie en ponerle inyecciones de productos dopantes sin que usted lo supiera?
R. Quizá para que yo tuviera más rentabilidad. P. Según Armin Meier, cuando él llegó al Festina, Roussel le dijo que era libre de doparse o no, pero que él aceptó porque es un profesional que se sentía obligado a hacer bien su trabajo de gregario y que esos productos permiten a los corredores ser regulares toda la temporada. ¿Qué tiene que decir sobre ello?
R. Cada corredor es diferente. Él puede elegir libremente a su médico. A mí nadie me obligaba a consultar a Rijckaert. Además, todos tuvieron presiones de la policía.
P. Siempre según Meier, él tomó varias veces esos productos. Para hacerlo se dirigía a un médico. Ya sea el doctor Jiménez, ya el doctor Rijckaert, y que se preparaba las inyecciones él mismo. ¿Qué tiene usted que decir?
R. Cada uno hace su vida. Cada uno consulta al médico. No porque mi vecino sea un atracador lo voy a ser yo.
P. ¿Cómo explica usted que tal proposición se le pudiera hacer a Meier, que recibe mensualmente 18.000 francos y que se considera un simple gregario?
R. Cada uno tiene su rendimiento físico. Por mi parte debo precisar que cuando he hecho el Tour he cogido el maillot amarillo. Mi morfología no ha sido modificada. (...)
P. Si usted no se dopa, si usted no pide ese tipo de productos, y si no ha sido dopado sin usted percatarse, ¿por qué razón ha precisado cuando aceptó que se le tomaran muestras que los resultados no debían ser publicados por la prensa, mientras que ha sido por el aspecto mediático por lo que el Festina fue excluido del Tour?
R. He aceptado que me tomaran muestras para que la justicia pueda hacer su trabajo, y no he querido que los resultados puedan ser el objeto de discusiones de subasteros, reservándome el derecho a demandar si se publicaban los resultados, fueran los que fueran. El juez. Presentamos a Virenque la Agenda 1998 y le pedimos que haga cualquier precisión útil. En cuanto a la presencia de su nombre en la fecha 30-7-98 con la mención X 2000, 30 de junio, 29 de junio 1 X 400, 28 de junio X 2000, 27 de junio X 2000, 26 de junio X 2000, 24 de junio X 2000, 23 de junio X 2000, 14 de marzo X 2000, 7 de marzo X 2000, todo subrayado con rotulador rojo, lo que corresponde, según Voet, a la toma de EPO.
R. Voet era mi masajista, o sea, me daba masaje. Las consultas las tenía con Rijckaert. Ignoro a qué corresponde la contabilidad de Voet con mi nombre y dosis.
Pregunta a Rijckaert. Acaba usted de oír a Virenque. ¿Qué tiene usted que decir y, sobre todo, quiere confirmar todo lo que ha declarado, a saber, que era imposible que Virenque ignorara el tipo de productos que se le inyectaba en la medida en que él conoce muy bien los medicamentos y los domina?
R. A comienzos de cada temporada, Virenque, como los demás corredores, pedía los productos que se utilizaban en los demás equipos. Cuando uso el término producto me refiero a los productos de los que se habla, a saber EPO, hormona del crecimiento y otro productos de recuperación. Por mi parte, nunca le he hecho una inyección a Virenque, pero preciso que Voet llevaba una contabilidad regular cada vez que había una inyección de dichos productos. Preciso también que sí que le he puesto inyecciones a Virenque, pero sólo después de las carreras y de productos de recuperación. La contabilidad permitía repartir financieramente a fin de año la utilización de dichos productos. Pienso que Virenque, como todos los demás, se ha beneficiado de los productos en cuestión, a saber, de la EPO y de la hormona del crecimiento. Pregunta a Virenque. ¿Qué tiene que decir de las declaraciones de Rijckaert?
R. Rijckaert se ocupaba de mí al 100% y, como hemos oído, acaba de declarar que no me ha inyectado productos dopantes. Por mi parte, yo no me he inyectado tampoco esos productos. En cuanto a la contabilidad establecida por Voet, se dice que servía para calcular la retención de las primas. Ahí preciso que, como yo hacía extras en viaje, era frecuente que se me retuviera las primas y que, además, yo daba todas mis primas a los corredores. Si la contabilidad no se llevaba bien o no correspondía a la realidad, se puede preguntar a quién beneficiaba. Si usted me pregunta quién se habría beneficiado, yo le digo que aquel que llevaba las cuentas.
Pregunta a Voet. ¿Qué tiene que decir a estas afirmaciones?
R. Todo lo que dice son chorradas. La agenda de 1998 corresponde a la realidad. Si el nombre de Virenque aparece es porque los productos en cuestión le han sido inyectados. Si yo tuviera que engañar a alguno, ése no habría sido Richard Virenque, a quien considero como mi propio hijo y que hoy me decepciona enormemente.
Pregunta a Virenque. ¿Qué tiene usted que decir?
R. Voet quiere hacer creer que yo soy su hijo espiritual, pero no ha dudado en atacarme mediáticamente. Se puede uno preguntar por qué razón si no fuera por un problema financiero. Por mi parte, yo nunca le he atacado.
Pregunta a Virenque. En sus declaraciones a la policía, usted declaró no estar al corriente de ninguna institucionalización del dopaje en el Festina, mientras que Rijckaert, Voet, Roussel, Moreno, Rous, Moreau, han contado que hubo una reunión de todo el equipo (cuadro técnico, equipo médico, corredores) donde se decidió que la compra de productos sería facturada proporcionalmente al consumo de los corredores. ¿Lo ratifica?
R. Sí. Pregunta a Virenque. También declaró a la policía que en lo que concierne a Voet usted tiene la sensación de que ha traicionado su confianza porque, a la vista de la cantidad de productos que se hallaron en su poder, suponía que dichos productos estaban destinados a los corredores de otros equipos aparte del suyo. ¿Tiene algo que decir sobre ello?
R. Desde el momento en que había otros productos, como yo considero que tanto un médico como un masajista están ligados al equipo del que forman parte, tengo el sentimiento de que hubo traición, de que teniendo en cuenta la magnitud del stock, esos productos estaban destinados a otros equipos. Pregunta a Voet. ¿Qué tiene que decir a lo que dice Virenque?
R. Estoy decepcionado por la actitud de Virenque. El equipo Festina lo forman 24 corredores, a los que les estaban destinados todos los productos. Éstos no sólo eran para el Tour. Si se hubieran repartido entre todos, no habría habido suficientes. Interrupción de Virenque. Y coger 400 dosis para franquear cuatro fronteras con anfetaminas y anabolizantes era arriesgarse. Se puede preguntar cuántas dosis serían necesarias para tres semanas de carrera.
Pregunta a Voet. Durante la investigación con comisión rogatoria se le ha cogido una agenda 1998. ¿Se trata de la única materialización de la institucionalización del dopaje en el seno del Festina o existen otros carnets o agendas anteriores?
R. Hay otras, sí, pero se me ha amenazado a mí y a mis hijos si las traía. No sé qué habría hecho usted en mi caso. Pregunta a Voet. Durante su interrogatorio del 23 de julio, usted precisó que el subrayado en amarillo o verde correspondía a la hormona del crecimiento, y el rosa, a la EPO. ¿Existía algún código más?
R. Existía otro código que no estaba inscrito en los carnets. Se trataba de un producto de la familia anabolizante. Se tomaba 15 días antes del comienzo de la carrera durante una semana, en forma de comprimidos.
Pregunta a Voet. De la consulta de la agenda 1998 se puede destacar que el 25 de marzo de 1998, junto a Hervé, figura la mención Vit. P. 20 + Vit C8, Fernando 30 P. ¿Qué tiene que decir?
R. Se trata del producto en cuestión.
Pregunta a Rijckaert. ¿Qué tiene que decir de ese punto?
R. Hace más o menos dos años, los líderes del equipo, ignoro si entre ellos estaba Virenque, hablaron de un producto fisiológico precursor de la testosterona utilizado en el seno de equipos españoles e italianos. Se trata de Andhéas, a saber, dihydroepiandosteronasulfato. Tanto yo como Voet rechazamos distribuir ese producto, pero un día me llamó Roussel y me dijo que si ése era el deseo de los corredores había que satisfacerles. Esto comenzó a finales de 1996.
Pregunta a Virenque. ¿Qué tiene que decir?
R. Ni Willy ni el doctor Rijckaert me han dado nunca ese producto. Nunca he estado al corriente de tal conversación entre Roussel, Willy y Rijckaert.
Pregunta a Voet. ¿Qué tiene usted que decir?
R. Me extraña mucho que un líder no esté al corriente de eso. He enviado ese tipo de producto a los corredores y especialmente a Virenque por correo.
Pregunta a Virenque. En sus declaraciones a la policía, usted ha declarado que en la medida en que Rijckaert hablaba con un ex corredor del Festina actualmente en el Polti, usted pensó que traicionaba al equipo. ¿Tiene algo que decir?
R. Se trataba de Luc Leblanc. Se fue del Festina dando un portazo y vistiendo el maillot de campeón del mundo. Se fue al Groupement. Poco después del comienzo de la temporada le vi entrevistarse íntimamente con Eric y me pregunté si no seguiría siendo su médico. Le expuse mis dudas a Voet, quien le pidió explicaciones a Rijckaert. Éste le respondió que hablaron simplemente de la lluvia y el tiempo.
Pregunta a Rijckaert. Ha oído a Virenque. ¿Qué tiene que decir? R. Pienso que es un prejuicio de Virenque. Por entonces, Leblanc era el rival de Richard, y entiendo muy bien los sentimientos de éste. Añado que había sido contactado por Le Groupement, dirigido por Patrick Walcke. Habíamos firmado Voet y yo un precontrato, pero finalmente decidimos quedarnos en el Festina. Poco después fue a verme Walcke y me preguntó, porque le presionaban sus corredores, si no deseaba trabajar para ellos conservando al mismo tiempo mis relaciones con Festina. Rechacé la oferta. Mantuve las relaciones con Leblanc, pero no como médico. Una vez le puse una inyección de cortisona porque sufría de una tendinitis. (...)
Pregunta a Voet. ¿El hecho de mostrar sus carnets por televisión es más peligroso o menos que traérselos al magistrado?
R. Sólo enseñé la página de Virenque porque éste me había tratado de camello y traficante.
Pregunta de Collard (abogado de Virenque) a Voet. ¿En qué momento ha sido usted amenazado?
R. Hace más o menos un mes. Hasta ayer, mi hijo tuvo la comunicación en que se decía que yo era un chivato y que me iban a cortar la cabeza si daba los carnets al juez. He presentado una demanda en la comisaría de Veynes en varias ocasiones.
Pregunta de Spender (abogado de Virenque) a Voet. ¿Por qué no ha traído hoy los carnets?
R. Ni lo he pensado. Nadie me los ha pedido, pero estoy preparado para traerlos. Y tengo que precisar que tengo miedo. Pregunta de Bessis (abogado de Voet) a Virenque. ¿En calidad de qué y por qué razón solicita usted la entrega de esos carnets?
R. Porque esos carnets, que se presentan como pruebas y donde aparece que me dopo desde hace lustros, han salido a subasta y lo hago en tanto que parte civil. Actualmente, yo soy el objetivo, pero quizá Willy esté obligado a poner en cuestión a ciertas personas. Mención. Constato que Bessis me hace saber su intención de presentar una demanda de parte de Voet por denuncia calumniosa contra Virenque debido a lo que ha dicho en el proceso verbal. También constato que Collard, por cuenta de Virenque, entiende constituirse en parte civil contra Voet por denuncia calumniosa tras la precedente denuncia calumniosa.
Pregunta de Bessis a Virenque. ¿Contra quién y por qué razón va usted a plantear una demanda?
R. Porque me considero víctima del sistema institucionalizado de dopaje.
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