Dirigentes del PP opinan que Arenas tiene ya manos libres para batallar más contra el PSOE
El PP andaluz está convencido de que la designación de Javier Arenas como secretario general, cargo que le obliga a dejar la presidencia del partido en la comunidad, lejos de debilitar la estructura regional, servirá de refuerzo para las próximas batallas con el PSOE. Varios dirigentes han destacado que Arenas, una vez fuera del Ministerio de Trabajo, se dedicará plenamente al partido. Por tanto, ahora tiene las "manos libres" para entrar directamente en guerra con los socialistas andaluces. En la clausura del XIII Congreso del PP, Arenas aseguró: "Nunca me iré de Andalucía".
El nuevo cargo de Javier Arenas como número dos del PP nacional ha disparado las especulaciones sobre su sucesor en la presidencia del partido de Andalucía, y en la candidatura del Gobierno andaluz. Pese a esta incertidumbre, nadie duda en el PP andaluz de que será Arenas quien seguirá tutelando el partido en la comunidad y que quien le suceda será una persona de absoluta confianza del nuevo secretario general. Los dirigentes consultados apuntan la relevancia del hecho de que Javier Arenas ya no tiene por qué mantener el perfil institucional al que estaba obligado como ministro de Trabajo y Asuntos Sociales. Aunque desde 1996 Arenas ha entrado directamente en varias de las batallas que mantienen los Gobiernos central y andaluz, ha habido ocasiones en las que, por razón de su cargo ministerial, se ha pronunciado con relativa prudencia, y ha dejado las declaraciones más duras para los dirigentes regionales. Durante este tiempo, el PP andaluz ha sugerido a Arenas la conveniencia de que él no entrase en el cuerpo a cuerpo con los portavoces del PSOE o de la Junta y que el peso de la oposición en Andalucía lo llevase el partido. El objetivo era que si tenía que polemizar directamente con alguien, fuese sólo con el presidente andaluz, Manuel Chaves. No obstante, y aún con esta recomendación, el nuevo secretario general del PP no ha resistido la tentación y ha entrado muchas veces en el enfrentamiento directo. Ahora, sostienen en el PP de Andalucía, Javier Arenas no tendrá la servidumbre institucional y gozará de libertad plena para hacer todavía más política de partido en Andalucía. De esta manera, según estos dirigentes, se espanta la posibilidad de que el PP andaluz se quede sin su referente más claro. En su discurso como nuevo secretario general del PP, Arenas lanzó un mensaje que puede leerse en clave andaluza. Dijo a los pensionistas que pueden estar tranquilos con su futuro y que el Partido Popular nunca les va a pedir un voto a cambio de su pensión.
Sin pistas sobre la sucesión
El futuro presidente del PP andaluz y candidato al Gobierno autonómico sigue siendo un misterio que de momento no tiene solución. Aunque oficiosamente ya se habla de la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, como presidenta del PP, la verdad es que Javier Arenas sigue sin dar ninguna pista. Todos los dirigentes del PP andaluz afirman no saber absolutamente nada de qué va a pasar a corto y medio plazo. En el Congreso Nacional del PP, en cualquier conversación con los populares andaluces, ha salido el asunto de la sucesión, pero sin respuestas claras. Eso sí, todos coinciden en que a estas alturas sólo saben qué va a suceder Arenas y José María Aznar. Arenas, una vez pasado el congreso, empezará a resolver la incógnita andaluza. Una incógnita que, en cualquier caso, no se despejará hasta finales de febrero, salvo sorpresa de última hora. En el congreso, el mutismo es lo que ha caracterizado a los posibles candidatos. Teófila Martínez, el portavoz parlamentario del PP, Manuel Atencia, y la secretaria general de Asuntos Sociales, Amalia Gómez, han guardado silencio o han hecho declaraciones para salir del paso. Las afirmaciones han sido del tenor de "el proceso se hará de forma tranquila" o "son varias las personas que optan al cargo".
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