La Mesa del Perro

"Todo se puede comprar con dinero, menos el movimiento del rabo de un perro", afirma Eugenio Moltó, el presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Málaga. Luego rectifica: "Bueno, no. Con unos pocos miles de pesetas se puede hacer mucho por el bienestar de un animal: vacunarlo, ponerle un microchip de identificación...". Moltó cree que el perro es un miembro más de la familia, "con sus derechos y sus deberes". Y precisamente para difundir esa idea entre los malagueños, y para concienciarles de los problemas de la población canina de Málaga, acaba de nacer la Mesa del Perro. Esta Mesa es una plataforma que reúne a varias instituciones (la Sociedad Protectora de Animales y Plantas, la Sociedad Canina Costa del Sol, el Colegio Oficial de Veterinarios) y al Ayuntamiento de Málaga. Está cargada de proyectos destinados a mejorar las condiciones de vida de los animales de compañía. Y para empezar, prepara una campaña de adopción responsable de perros. En vez de comprar un cachorro nuevo, puede llevarse uno de la Sociedad Protectora o del Parque Zoosanitario del Ayuntamiento. Ahora hay 1.000 perros en Málaga esperando que alguien los adopte. Otros 600 ya han encontrado una familia que los quiera. Partiendo del principio de que "conocerlos es quererlos", la Mesa ha decidido organizar las I Jornadas de Animales de Compañía en Málaga. El 30 y el 31 de enero se celebrarán en el Centro de Exposiciones de Renfe varios concursos de perros. Habrá puestos informativos donde se proyectarán vídeos, e incluso se mostrará en directo a los visitantes cómo se implanta un microchip. "Para colocar el chip bajo la piel sólo hacen falta cinco minutos", explica Moltó. "De este modo el animal queda perfectamente identificado, como si llevase un código de barras invisible. Si se pierde, se le pasa un lector parecido al de los supermercados, y en la pantalla del ordenador aparecen los datos de su dueño". Esto, que cuesta unas 5.000 pesetas, puede salirle gratis si se acerca a las Jornadas con su perro, su DNI y la cartilla sanitaria de su mascota. Así cumplirá con sus obligaciones legales; en el municipio de Málaga el microchip es obligatorio, para evitar abandonos, extravíos y robos. Pero de los 150.000 perros que se estima que viven en Málaga sólo lo llevan 7.316. Manuel Ramírez, presidente de la Sociedad Canina Costa del Sol, lamenta esta situación. "A estas alturas, en Málaga debía haber 70.000 perros identificados". Y, a su juicio, es un problema de información. "Los medios de comunicación sólo prestan atención a los perros cuando atacan a alguien. Y miles de animales ayudan a la sociedad cada día: hacen salvamentos, detectan explosivos, guían a los ciegos. Pero da igual. Si un perro cualquiera mete la pata, todos los demás acaban pagando el pato". Ramírez está convencido de que "no hay perros peligrosos, sino dueños que no saben lo que hacen". Por eso, una de sus ideas para estas Jornadas consiste en dejar que los niños jueguen con perros de las razas que se consideran "asesinas", para que les vayan perdiendo el miedo. Eugenio Moltó está de acuerdo en la necesidad de difundir las innumerables virtudes de los perros, que, entre otras cosas, alargan la vida de sus dueños. "Muchos estudios médicos demuestran que los animales de compañía dan longevidad. No sólo por razones afectivas, sino porque obligan al dueño a hacer ejercicio para sacarlos de paseo. Eso da salud".