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Una actriz de "Maité" demanda a ETB y a la productora por incumplir el convenio

Maribel Marín Yarza

La actriz cubana Cary Rosa, una de las intérpretes de la serie Maité, ha demandado a Igeldo, la productora de la serie, y a ETB por presunto incumplimiento del convenio de actores en cuestión de salarios mínimos y dietas. El responsable de Igeldo, Ángel Amigo, y la televisión vasca se sentarán mañana en el banquillo de un Juzgado de lo Social de San Sebastián. Amigo reconoce haber eludido el convenio de actores, pero afirma que "su aplicación en Euskadi implicaría la desaparición de la producción audiovisual vasca".

La demanda, cursada por Comisiones Obreras, reclama para Cary Rosa un total de 9.026.961 pesetas más el 10 % de intereses de demora, para saldar las diferencias existentes en cuestión de salarios, dietas y alojamientos, entre la retribución percibida por la actriz y lo que establece el Convenio de Actores de julio de 1995. La demanda se asienta en el Estatuto de los Trabajadores, que en su artículo 82.3 obliga el cumplimiento de esa normativa y se hace extensivo a ETB en virtud del 42, que indica sin ambigüedades: "Los empresarios que contraten o subcontraten [...] responderán solidariamente de las obligaciones de naturaleza salarial contraídas con sus trabajadores". Amigo contrató a Cary Rosa para realizar la continuación en serie de la película Maité. La actriz nunca había trabajado antes en España y firmó el contrato "confiada de que las proposiciones" que le hicieron en Igeldo, según sus propias palabras, "eran las normales". El éxito de los primeros 13 capítulos de la serie supusieron su renovación del contrato por otros tantos, que precisamente se emiten desde la pasada semana. Y Cary Rosa se enteró después de que se le estaba pagando por debajo de lo estipulado en convenio. El productor no lo niega, aunque certifica diferencias entre sus cálculos y los que plantea la trabajadora. El convenio, que a juicio de Amigo no se corresponde con la situación del sector vasco, se consensuó en Madrid "pensando en producciones para TVE, Tele 5 o Antena 3", que cuentan con unos presupuestos mayores -más de 40 millones, frente a los 4 por capítulo de Maité-. Se ampara además en que la Unión de Actores vascos no ha demandado su aplicación "por las implicaciones que puede tener". "De hecho", afirma, "la mayoría de los afiliados están con contratos que no cumplen el convenio". A juicio de Amigo, su aplicación supondría "la desaparición de la producción audiovisual vasca". El productor alude a la dimensión propia del sector, determinada en gran medida por la existencia "de una televisión pequeña como ETB". El secretario de la Unión de Actores Vascos, Kike Díaz de Rada, confirma la existencia de irregularidades en muchos contratos, que no se han denunciado por "miedo" a cerrarse las puertas para trabajar en Euskadi. Cary Rosa coincide en este extremo: "Nadie quiere ir contra él, porque tienen miedo. Pero yo no vivo aquí y considero que ésta no es la forma legal de hacer las cosas". La cuestión radica ahora en que si la actriz ganara la demanda, otros actores podrían reclamar lo que se les adeuda. El resto de actores cubanos no han interpuesto reclamación alguna, según la actriz, por cuestiones personales que les impedían seguir en España hasta que finalizara el proceso; según Amigo, porque han sacado una lectura positiva de su contrato. El productor cree, en todo caso, que no se encuentra ante un problema sindical: "Es una cuestión personal de Cary Rosa que ha optado por vivir en España y necesita financiar su aventura".

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