"Las mujeres queremos una ciudad compartida"

La consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Carmen Calvo, militante e investigadora del feminismo, animó ayer a las barcelonesas a luchar para "no ser ninguneadas" y a tomar la palabra pública para conseguir que su ciudad sea como la que desea el colectivo femenino que habita en ella. Calvo, quien pronunció la conferencia inaugural del I Congreso de Mujeres de Barcelona, consideró que el acceso al poder en el ámbito local constituye la herramienta más eficaz para que las mujeres hagan valer su voz y su mirada en el proceso de construcción y planificación de su ciudad. "El poder local, que es el más próximo y lo más doméstico después de nuestras casas, representa una gran oportunidad para que las mujeres formen parte de la ciudadanía y para democratizar aún más la democracia", dijo Calvo. El tono crítico y la fina ironía utilizada por la conferenciante, quien desmontó mitos sexistas como el que reza que "el poder masculiniza a las mujeres", arrancó en varias ocasiones la ovación de las 2.300 mujeres que abarrotaban la sala de actos del Palacio de Congresos de Montjuïc. "Queremos una ciudad compartida", dijo Calvo en alusión al lema del congreso: "La ciudad que las mujeres queremos". La doctora Victòria Sau, mentora del congreso, añadió: "Queremos otra cosa, y queremos algo más de lo que tenemos". El acto inaugural del congreso finalizó con un homenaje a la recientemente desaparecida Maria Mercè Marçal. El congreso finalizará esta tarde tras la presentación de las conclusiones. Por la mañana, las congresistas habrán debatido las cuatro ponencias en las que han trabajado a lo largo de un año más de un millar de barcelonesas. Los documentos contienen propuestas para que la ciudad se construya teniendo en cuenta que también viven en ella las mujeres, "sus principales usuarias".