Aceites Ecológicos deja Arganda a cambio de suelo recalificado

Aceites Ecológicos, empresa dedicada al reciclado de lubrificantes industriales, se marcha de Arganda. El gobierno municipal, del PP, y los propietarios de la factoría han rubricado un acuerdo que pone fin a más de dos años de protestas vecinales.

El pacto entre los empresarios y los políticos para que la fábrica cierre sus puertas incluye la recalificación de los 46.000 metros cuadrados que ocupa actualmente para convertirlos en un pequeño polígono industrial destinado a industrias inocuas. Además, el Consistorio facilitará a los propietarios de la empresa otra parcela de 34.000 metros para levantar viviendas en la zona de Valdelarcipreste. A cambio, Aceites Ecológicos se compromete al cese completo de su actividad.La oposición (IU y PSOE) reclama una investigación "por si hubiera algún tipo de especulación de por medio".

Por su parte, el portavoz de Medio Ambiente del Grupo Parlamentario Socialista, Armando García, pidió ayer al consejero de Medio Ambiente explicaciones sobre "qué va a pasar ahora con los 70 millones de pesetas concedidos por el ministerio a Aceites Ecológicos". "¿Si cierran la empresa, tendrán que devolver el dinero?", se preguntó García.

El director general de Calidad Ambiental, Ignacio López-Galiacho, explicó ayer que esa subvención fue concedida por el Ministerio de Medio Ambiente "por actividades realizadas con anterioridad al cierre".

Con el acuerdo se pone fin a un conflicto abierto en 1996. Los residentes junto a la empresa se quejaban de fuertes olores y molestias respiratorias producidas por la fábrica. Tras una de las múltiples protestas por los malos olores, el gerente de la empresa acudió un domingo a investigar lo que sucedía y encontró la muerte, asfixiado, dentro de un colector. El Ayuntamiento cerró la fábrica, pero un auto del Tribunal Superior de Justicia autorizó su reapertura.