La oposición ve en la decisión de la consejera una maniobra del PP para desestabilizar a los regionalistas

Los partidos de la oposición se mostraron ayer prudentes a la hora de valorar la decisión de la consejera de Agricultura, aunque expresaron su temor a que el anuncio de María Ángeles Ramón-Llin responda a una maniobra del Partido Popular para desestabilizar a sus coaligados de Unión Valenciana. El secretario de los socialistas valencianos, Joan Romero, señaló que si en la decisión de la consejera hay un "trasfondo político adicional de desestabilizar a una formación política unos meses antes de las elecciones se estaría ante una situación grave". "Si es una decisión personal, el asunto debería quedar ahí y no hay nada que objetar", dijo Romero, para quien "lo lógico" sería que el cargo puesto a disposición de Zaplana sea cubierto a propuesta de Unión Valenciana. El portavoz adjunto de Esquerra Unida en las Cortes Valencianas, Pasqual Mollà, manifestó: "Estamos probablemente ante un nuevo caso de transfuguismo político, del que Zaplana es especialista. La política de presión del PP sobre UV está dando sus frutos, pese a todas las declaraciones y pactos sobre el transfuguismo firmados". El diputado de EU dijo: "Seguramente, veremos a Ramón-Llin en las listas electorales del PP o en lugares de representación que el PP le pueda dar". El secretario general de Nova Esquerra, Ricardo Peralta, señaló que la decisión de la consejera es "una prueba más de la debilidad del pacto de gobierno PP-UV" y recalcó que ésta "procede de la falta de un verdadero proyecto político común para nuestro país en estos dos partidos que se limitaron a firmar un simple pacto de defensa de intereses conservadores de grupos sociales y de personas". El candidato autonómico del Bloc Nacionalista Valencià, Pere Mayor, valoró como un acto de irresponsabilidad la dimisión de la consejera de Agricultura María Ángeles Ramón-Llin, "sobre todo cuando faltan sólo seis meses para las próximas elecciones". Para Mayor, la dimisión de Ramón-Llin, "evidencia la crisis que padece UV como una formación incapaz de marcar diferencias con el PP".