El club quiere llenar hoy su campo y ayer regaló todas las entradas
El partido de Liga que el Atlético de Madrid jugará esta tarde en su campo frente al Extremadura se ha convertido en algo más que una cita deportiva con tres puntos en juego. El encuentro está preparado para transformarse en un acto de solidaridad, apoyo y homenaje de los aficionados a su presidente Jesús Gil. Con ese objetivo, los dirigentes del club decidieron ayer que el precio de las localidades del partido sería de cero pesetas, es decir, gratis. La respuesta no se hizo esperar. A las cinco de la tarde de ayer, apenas unas horas después de abrirse las ventanillas, se colocó el cartel de "no hay billetes" en las taquillas del club. Se espera que el campo del Vicente Calderón, pese a que el rival sea una de los equipos más débiles y peor clasificados de Primera División, registre una entrada histórica: se espera que más de 59.000 aficionados abarroten el graderio.
Las colas de aficionados ante las taquillas para obtener una entrada gratis dieron ayer más de una vuelta al campo del Vicente Calderón. El Atlético dispuso para estos aficionados las casi 30.000 entradas que suele poner a la venta en cada partido, salvo las correspondientes a los abonados. Una vez agotado este cupo de entradas se cerraron las taquillas. Dirigentes del club aseguraron que hasta entonces sólo se habían vendido al público 104 entradas y que estaban dispuestos a devolver su importe al presentar la localidad.
Pérdidas sin calibrar
Estos dirigentes indicaron, además, que no se han parado ni un momento en calibrar la pérdida económica que representará su decisión. El Atlético se enfrenta a uno de los equipos menos taquilleros de la categoría y había presupuestado ingresos por unos 15 millones de pesetas.
Fuentes del club madrileño señalaron ayer que la intención de la familia Gil, amo de la entidad, es evitar que cualquier aspecto político incida en el desarrollo del partido y que, con ese fin se ha desistido de desplegar pancartas con el lema de "Gil, libertad" así como ofrecer un mensaje grabado del presidente, como estaba previsto. Lázaro Albarracín, uno de los vicepresidentes del club que asistirá al encuentro, antes del inicio del partido leerá un breve comunicado para agradecer a la afición su solidaridad y apoyo a Jesús Gil.
Lázaro Albarracín aseguró a la agencia Efe que el sillón del presidente en el palco del Vicente Calderón no será ocupado por ningún dirigente del club. "Aunque este vacío su asiento", declaró Lázaro Albarracín, "Jesús Gil presidirá simbólicamente el partido". Su hijo Miguel Ángel, director general del club, ha confirmado su asistencia al encuentro.
Jesús Gil dispone desde ayer de un aparato de televisión en su celda y tiene previsto presenciar en directo el encuentro a través de Canal+, que transmitirá el partido a las 19.30 horas.
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