Zaplana está dispuesto a legalizar la emisión de TV-3 en la Comunidad Valenciana si Pujol se lo pide

En estos momentos, las señales de TV-3 y Canal 33 llegan a la Comunidad Valenciana de forma alegal mediante repetidores instalados por Acció Cultural del País Valencià (ACPV). Lo mismo sucede en Baleares con las emisiones de los canales catalanes y valencianos, garantizadas allí por Obra Cultural Balear (OCB). Zaplana, que el viernes se reunió en Mallorca con su colega balear y compañero de partido, Jaume Matas, formalizó la entrega al Gobierno isleño de la "titularidad de la señal pública de Canal 9 y Notícies 9 para garantizar a los ciudadanos de Baleares la recepción de la señal en nivel de calidad y cumplir un mandato institucional". Esta iniciativa se ha interpretado como una medida de presión contra OCB, que gestiona los repetidores de los canales catalanes y valencianos que se instalaron desde hace una década por suscripción popular, puesto que, una vez que la titularidad se haga efectiva con la ley de terceros canales, los repetidores dejarán de ser alegales para convertirse en ilegales y, por tanto, serán intervenidos, adquiridos o clausurados por las instituciones. La situación en la Comunidad Valenciana es idéntica, ya que la titularidad de los repetidores la ostenta ACPV, movimiento que comparte las aspiraciones políticas y lingüísticas de OCB, pero Zaplana se esforzó ayer por quitar hierro político al asunto. "Yo jamás tomaré decisiones que vayan contra la libertad de información, y por eso no he tomado ninguna medida contra las emisiones alegales de TV-3 y Canal 33", dijo, y justificó la concesión de titularidad al Gobierno balear en el intento de "hacer las cosas desde la mayor legalidad posible". Matas ya anunció el viernes que propondrá a Pujol que haga lo mismo que Zaplana.