Aznar afirma que agotará la legislatura y no anticipará las elecciones

El presidente del Gobierno, José María Aznar, mostró ayer su conformidad con la fecha de las elecciones catalanas marcada por el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y se mostró especialmente conforme con la decisión de Pujol de agotar la legislatura. "Creo que el valor de la estabilidad es un valor que debemos preservar y conservar para el futuro.Yo mismo convocaré elecciones para el año 2.000 y, por tanto, también agotaré mi legislatura", dijo. El presidente del Gobierno se reunió con militantes y simpatizantes del PP del Valle de Aran para hacer un balance del año.El vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos, también abundó ayer en Oviedo en el mismo tema electoral y ratificó que el Ejecutivo agotará la legislatura, informa Javier Cuartas. Cascos dio por seguro el mantenimiento de la estabilidad parlamentaria merced al respaldo de CiU, PNV y Coalición Canaria.

El vicepresidente dijo: "Mi opinión es que José María Aznar agotará la legislatura. Esta es la previsión que hay hoy". Álvarez Cascos expresó su convicción de que las fuerzas nacionalistas mantendrán durante 1999 los acuerdos con el Gobierno del PP "en los mismos términos que en 1998", por lo que considera garantizada la estabilidad hasta el fin de la legislatura.

Cascos confirmó también que el Gobierno mantiene conversaciones con los partidos de la oposición para desbloquear el proyecto de ley del Cesid, como anticipó ayer EL PAÍS. El vicepresidente primero ratificó la voluntad del Gobierno de "dotar al servicio de inteligencia de una norma con rango legal que lo equipare a los servicios de otros países" y reclamó para ello el consenso entre las fuerzas políticas como marco idóneo para hacerlo posible. Este consenso no había sido factible con anterioridad, explicó, por "determinados sucesos que dificultaron el acuerdo". Citó como ejemplo la "polémica política suscitada por la interpretación de la Ley de Secretos Oficiales".

El vicepresidente sostuvo, a propósito del caso Segundo Marey, que el Gobierno hizo exactamente lo que debía hacer: "Actuar con diligencia ante un expediente que le había sido remitido con urgencia por el Tribunal Supremo", por lo que se identificó con la decisión del Consejo de Ministros para aplicar el indulto parcial a los condenados.

Negocios particulares

Álvarez Cascos, que celebró ayer una conferencia de prensa en la Delegación del Gobierno de Asturias para explicar los logros materializados por el Ejecutivo en esta comunidad autónoma, vertió graves acusaciones contra la Unión Renovadora Asturiana (URA), la formación política que promueven militantes y ex militantes del PP partidarios de Sergio Marqués, presidente del Principado, en su enfrentamiento con Cascos. El vicepresidente y secretario general del PP afirmó que URA no será un partido político sino "una oficina de negocios particulares". "Es lo más que podemos confiar que salga de esa organización", añadió.

Cascos sostuvo que el PP ha demostrado en Asturias tener "organización, proyecto y respeto a la ética, a la ley y al Estado de derecho", por lo que no prevé que la grave crisis que divide y enfrenta a los populares asturianos se traduzca en un castigo electoral a su partido en los comicios autonómicos de junio próximo ni en un respaldo mayoritario para URA.