El Festival de la Infancia y de la Juventud pretende superar los 260.000 visitantes La edición de este año apuesta por el fomento de la solidaridad y el civismo

arcelona [EN] El Festival de la Infancia y de la Juventud, que abrió ayer sus puertas, pretende superar en su 36ª edición la cifra de los 260.000 visitantes que recibió el año pasado. El festival fue inaugurado por la presidenta del comité organizador y esposa del presidente de la Generalitat, Marta Ferrusola, junto al consejero de Cultura, Joan Maria Pujals, y la presidenta de la Comisión de Ciudad Amiga del Ayuntamiento de Barcelona, Teresa Sandoval. El salón, que ocupa una extensión de 75.000 metros cuadrados y cuenta con la participación de 50 empresas y entidades, estará abierto hasta el 4 de enero. La entrada cuesta 700 pesetas, aunque para los socios del Club Su-per 3 es gratuita.

En esta edición, el festival ha apostado por el fomento de la solidaridad y el civismo. Y, como el año pasado, el festival llevará a cabo la campaña de recogida de juguetes organizada por numerosos medios de comunicación de Barcelona. El festival sorteará 40 viajes a Disneyland París entre quienes aporten algún juguete, que deben ser nuevos y no bélicos. Los organizadores pretenden superar los 160.000 juguetes recogidos en la edición pasada. Otra iniciativa solidaria es la que lleva a cabo en el recinto ferial la ONG Intermón, que a través de su Puzzle de la solidaridad recogerá dinero para programas de desarrollo en el Tercer Mundo. Entre los destinatarios de la ayuda se encuentran los países centroamericanos afectados por el huracán Mitch. Cada participante puede adquirir un lote de piezas por el precio de 100 pesetas, y para los que consigan completar un puzzle habrá un obsequio. Los visitantes pueden participar incluso en actividades de solidaridad virtual, por ejemplo, en el juego Infoespacio, que tiene como objetivo fomentar la solidaridad a través de Internet. También hay espacio para expresar la solidaridad con los animales de compañía que son abandonados por sus dueños. El Consejo Municipal de Convivencia, Defensa y Protección del Ayuntamiento de Barcelona, junto a la Liga Protectora de Animales y Plantas, ha instalado una caseta para que los visitantes que lo deseen puedan adoptar un perro o un gato abandonado. El portavoz del Consejo Municipal de Convivencia, Toni Sánchez, indicó que estas fechas pueden ser propicias para salvar la vida de un animal de compañía, ya que muchos de los que son abandonados por sus amos acaban siendo sacrificados. Además de la solidaridad, este año el Festival de la Infancia y de la Juventud ha apostado fuerte por la promoción del civismo. El Ayuntamiento de Barcelona ha elegido el tema de la participación como eje de sus actividades en el festival. Por primera vez en la historia del salón, los niños y jóvenes de Barcelona han podido diseñar un espacio a su medida, el Espacio experimental de participación, que representa a su ciudad. La mayoría de las actividades del Ayuntamiento de Barcelona están relacionadas con la participación de los más pequeños en la vida ciudadana: desde un foro en el que poder pronunciarse sobre el tipo de urbe que desean hasta explicar a través de las cámaras los asuntos que más les preocupan. La Generalitat ha apostado por otro tipo de civismo, más emparentado con el mensaje nacionalista de la coalición gobernante, Convergència i Unió (CiU). La nueva realidad europea centra este año las actividades organizadas por la Secretaría General de Juventud. Bajo el lema Jóvenes catalanes, ciudadanos europeos, la Generalitat ha organizado una serie de actividades relacionadas con la realidad política, económica y cultural europea. El juego del euro Una de las actividades estrella de la caseta de Juventud es el Juego del euro, que combina el aspecto lúdico con el de la más rabiosa actualidad: la nueva moneda europea que entrará en vigor el 1 de enero de 1999. Pero los niños y jóvenes también tendrán acceso a cuestiones menos trascendentales, aunque tal vez más interesantes para ellos: en la zona de espectáculos de la caseta se enseñarán danzas y canciones de toda Europa y también habrá un espacio dedicado a los juegos tradicionales del Viejo Continente. En este espacio hay un mapa de Europa en el que cada visitante puede colocar su fotografía. Marta Ferrusola, que dijo sentirse primero ciudadana catalana y luego europea, colocó ayer la suya en la ciudad de París.