La desobediencia de Juninho
Juninho estaba obcecado. Sus intentos de penetrar la defensa del Zaragoza se quedaban en nada. Pedía el balón continuamente. Estaba ansioso por capturar el cuero y disparar. Y cuando pitaron una falta a favor del Atlético -Toni cayó a unos metros de la frontal izquierda del área- mediando el segundo tiempo, Juninho no escuchó las órdenes que le llegaban desde el banquillo: Sacchi mandó a grandes voces que disparara Mena. Y cuando Mena fue a lanzar el libre directo, Juninho se le adelantó. "Si se tenía fe, está bien, no hay problema, cualquiera puede patear los tiros libres", comentó Oscar Mena, evitando polémicas y con la mente más puesta en Barajas -a las 23.00 se embarcaba hacia Argentina, de vacaciones- que en un partido para olvidar. El argentino reconoció que Sacchi le había pedido que pateara ese tiro. Nada extraño si se tiene en cuenta que en el entrenamiento del viernes fue Mena el más acertado en la práctica de lanzamientos francos.
Al ver que pateaba Juninho, el entrenador del Atlético no pudo contenerse. De natural desapacible durante los partidos, Arrigo Sacchi hizo gestos airados. Una vez pitado el final, el técnico expuso sus razones: "Quería que disparara Mena porque corría mucho viento, y Mena le pega raso, tiene un disparo muy potente a ras de hierba. En cambio Juninho golpea por encima de la barrera y el balón se lo iba a llevar el viento".
Juninho no ejecutó bien el lanzamiento. "Juninho es un hombre con mucha garra, muy ambicioso y eso se vio en el tiro libre", explicó Sacchi. El italiano analizó el estado del delantero brasileño: "Entre las lesiones y las expulsiones ha pasado mucho tiempo inactivo, y eso lo ha llevado a perder confianza, convicción y seguridad en lo que hace". Juninho lo admitió: "Hoy no me salió nada".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.