Más transporte público

El éxito de la ampliación del aeropuerto de El Prat depende de muchos factores, pero uno de ellos no ha sido rescatado hasta hace bien poco: la necesidad de una mejor conexión de las instalaciones aeroportuarias con el territorio a través de la red de transporte público. El alcalde de El Prat, Lluís Tejedor, planteó ayer por primera vez públicamente un objetivo concreto: tras la ampliación del aeropuerto, el porcentaje de viajeros que llegue a las instalaciones aeroportuarias en transporte público deberá ser del 50%. El camino por recorrer hasta alcanzar ese porcentaje es muy largo, dado que en la actualidad sólo el 11% de los usuarios del aeropuerto van a coger el avión en transporte público. Y eso ahora, cuando el número de pasajeros anuales se sitúa en 17 millones. La meta de que aproximadamente la mitad de los usuarios accedan al aeropuerto en transporte colectivo no se debe establecer respecto a esa cifra, sino a los 40 millones de pasajeros por año, que es el techo del aeropuerto tras su ampliación. "No podemos esperar al año 2014. Se tiene que empezar a planificar ahora y no puede ser un tema secundario", señaló Tejedor. En la actualidad, llegan al aeropuerto una línea de autobús y otra de Renfe. Tejedor apostó por un sistema de transporte intermodal en el que se impliquen los trenes de Renfe y los Ferrocarils de la Generalitat y el metro. El modelo debería definirse, en todo caso, en el marco de la Autoridad del Transporte Metropolitano. La apuesta por el transporte público se hace necesaria, además, ante el más que previsible colapso circulatorio que se producirá en las vías de acceso al aeropuerto si no se invierte la tendencia. La entrada en servicio, a finales de mes, de la pata sur, que conectará las rondas con el aeropuerto y también con la autopista A-16, "no será milagrosa", señaló Tejedor, y vaticinó que dentro de unos años "las colas podrán llegar a Vall d"Hebron". El Ayuntamiento de El Prat quiere, además, aprovechar la coyuntura para barrer para casa. Tejedor piensa reclamar que las líneas de transporte colectivo que conecten con el aeropuerto tengan estaciones o apeaderos en el núcleo urbano.