Anguita deja la dirección del PCE con ataques a socialistas y populares
Genio y figura. Julio Anguita, secretario general del PCE, dejará hoy la máxima responsabilidad del partido con un discurso en el que reparte sus ataques tanto al PSOE como al PP. Si hay errores en el Gobierno de José María Aznar es porque continúa las políticas de los Gobiernos socialistas de Felipe González, afirma Anguita. Y se pregunta si el PCE ha sabido ser eficaz y consecuente. Francisco Frutos, propuesto por unanimidad como candidato a la Secretaría General, garantizó ayer la continuidad en la política del PCE.
En el metro de Nueva York apareció una pintada: "Dios es la respuesta". Al día siguiente, alguien añadió: "¿Cuál era la pregunta?". Julio Anguita cerrará hoy su informe de 76 páginas con una terrible duda para quien ha tenido durante una década la responsabilidad de la organización comunista. El secretario general saliente muestra en el texto su fe en la inmortalidad del alma comunista. "El PCE existirá mientras haya opresión, injusticia, manipulación, alineación o explotación que derribar. Pero en cada momento, en cada fase o coyuntura histórica", dice, "los comunistas deben adecuar su organización a lo que la realidad a transformar les demande". Ésa, posiblemente, sea la respuesta. ¿Cuál era la pregunta? La que deja colgada es: "¿Cómo ser más eficaces, más combativos, más preparados y más consecuentes con los principios que fundamentan nuestra teoría política en nuestra organización llamada PCE?".Pero, si en esto reconoce dudas, Anguita no las tiene al analizar la situación europea y diseccionar la española. En el panorama internacional abunda en sus análisis anteriores: globalización y neoliberalismo, crisis financiera, Rusia, capitalismo y métodos de dominación... De España viene a decir algo -y recoge textos antiguos para acreditarlo- que ya ha venido diciendo: el PSOE y el PP tienen pocas diferencias: "El Gobierno Aznar ha desarrollado hasta sus últimas consecuencias los contenidos de política económica, social e internacional (con algunas excepciones esta última) que se habían desarrollado durante los de González". Y cita la política de privatizaciones, el recorte del gasto público, la contrarreforma fiscal, el sometimiento a Estados Unidos...
Sospechosas coincidencias
No deja Anguita ni un resquicio para salvar a los socialistas. Si el PP ha intentado un distanciamiento respecto a problemas como el de los GAL, sólo la torpeza del PSOE impide la "normalización" que buscan ambos. Los dos partidos, advierte, tienen sospechosas coincidencias en asuntos como la pacificación de Euskadi y la "política de Estado", lo que ha llevado "a un debate tramposo".Así que vuelve Anguita a sus ideas sobre las dos orillas. "Sólo IU y el PCE han sido coherentes. Han dado y están dando pruebas de prudencia, sensatez, equilibrio, coherencia y rigor en la propuesta alternativa". La tregua de ETA, por ejemplo, ha mostrado las "contradicciones en el Gobierno". Pero, además, el PSOE no ha sido capaz de "establecer una sintonía entre su organización federal y la de Euskadi". En definitiva, todo gira en torno a consolidar el bipartidismo entre dos organizaciones que buscan lo mismo: institucionalizar el déficit o la práctica supresión del papel del Estado en el bienestar social. Anguita dedica sus últimas páginas a reivindicar el papel histórico del PCE, su lucha por la libertad, y el que debe jugar en esta sociedad y en IU. Ayer mismo, Francisco Frutos aclaraba que el PCE nunca ha pretendido una presencia hegemónica en IU para dominar, sino para trabajar en el respeto a sus hombres y mujeres. Sobre la nueva dirección, subrayó que confía en que sea "plural". En cualquier caso, aseguró, la línea será continuista.
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