El Gobierno logra el apoyo de Comisiones Obreras para penalizar los contratos temporales

El Gobierno del PP logró ayer el respaldo de Comisiones Obreras para penalizar los contratos temporales. Es el primer pacto en solitario que alcanza el sindicato. Y lo hace con un Gabinete conservador. La penalización consiste en una subida de 0,5 puntos en sus cotizaciones por desempleo y de 1,5 puntos en los contratos que realicen las empresas de trabajo temporal (ETT). También incluye incentivos para los nuevos contratos a tiempo parcial con carácter fijo. UGT y la patronal CEOE analizarán el contenido, pero todos los indicios apuntan a que ninguna de las dos organizaciones lo va a apoyar.

La dirección de CCOO dio ayer un paso insólito en su estrategia histórica al alcanzar el primer preacuerdo con un gobierno. Como también es inusual que UGT se quede fuera de un pacto social, circunstancia que no se ha dado desde la transición democrática hasta ahora. Un distanciamiento entre las dos centrales que se produce en vísperas de las movilizaciones del jueves y que se une a las discrepancias manifestadas desde el verano.El preacuerdo se ha venido elaborando entre los responsables de Trabajo y CCOO desde el miércoles pasado, cuando UGT dio por terminado este proceso de diálogo y rehusó asistir a la reunión fijada por el ministerio. Los principales contenidos son: Penalización de la temporalidad. Se incrementa 0,5 puntos la cotización por desempleo que pagan las empresas (ahora está en el 6,2%) en los contratos temporales, salvo los de formación, prácticas, relevo y discapacitados. La subida es de 1,5 puntos para los contratos que realicen las empresas de trabajo temporal (ETT) y los de tiempo parcial eventuales. Además, se equipararán los salarios de las ETT con los de las empresas usuarias.

Evitar el encadenamiento. Con ese objetivo, los contratos eventuales no podrán tener más que una prórroga y a partir de ahí se convierten en indefinidos.

Incentivos a los contratos a tiempo parcial. Los que tengan carácter fijo tendrán una reducción en sus cuotas entre el 25% y el 45%. También se prorrogan por dos años, aunque con menor cuantía, los incentivos a los contratos estables de la reforma de 1997.

Coste presupuestario. Las bonificaciones al empleo fijo tienen un presupuesto de 300.000 millones de pesetas, de ellos 10.000 son para tiempo parcial estable. La penalización de la temporalidad supone 28.000 millones.

Ley de Contratos del Estado. Se eliminará su realización con ETT y habrá primacia en los concursos para aquellas empresas que tengan más empleos fijos.

Plan de Empleo Público. Las bajas en la Administración se repondrán por encima del 25%, cerrando el paso a la contratación temporal, y se definirá un plan a cuatro años para ir transformando empleo eventual en fijo.

Aumento de la Inspección. El Ministerio de Trabajo potenciará la tarea de sus inspectores en las empresas para controlar el abuso de la temporalidad.

CCOO firmará este preacuerdo cuando conozca el texto definitivo, introducido ayer como enmiendas a la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 1999, y presentadas por el PP en el Senado. El sindicato cree que es "un avance" el compromiso adquirido con Trabajo, porque responde a la plataforma unitaria presentada junto a UGT a finales de octubre. Comisiones afirma que esas medidas suponen "una apuesta decidida por la estabilidad y de ella podrán beneficiarse 3.300.000 trabajadores con contratos temporales". La UGT dará su valoración oficial del preacuerdo cuando conozca su contenido, pero ayer sus máximos dirigentes adelantaban que no van a aceptar "regalar 300.000 millones de pesetas en incentivos a los empresarios", ni van a avalar los presupuestos del Inem, que consideran "trucados". En cuanto a la penalización de los contratos temporales, recuerda que es una facultad que tenía el Gobierno desde enero, en los Presupuestos de 1998, y no utilizada.

En cuanto a la patronal CEOE, ayer expresó su rotunda oposición a la decisión del Gobierno de subir la cuota empresarial a los contratos temporales y señaló que no hay argumentos para justificarlo cuando la Seguridad Social tiene "un superávit cuotas de un billón de pesetas".