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Ruiz-Gallardón opone un tren subterráneo a las autopistas de peaje del alcalde

Un túnel de 10 kilómetros en Madrid uniría las líneas de cercanías del sur y el este

Vicente G. Olaya

El Gobierno regional de Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, ya tiene su alternativa subterránea al macroproyecto del Ayuntamiento de Madrid de horadar la capital con 140 kilómetros de autopistas de peaje. Para ello, la Comunidad ha pintado bajo el subsuelo de la capital un gran túnel de 10 kilómetros que servirá para unir las líneas férreas de cercanías del corredor del Henares (C-2) y Móstoles (C-5). Los técnicos regionales han bautizado esta línea como la gran transversal.Este túnel aparece reflejado en el denominado Plan Estratégico Regional de Ordenación del Territorio, un documento que diseña el crecimiento de la región para los próximos 20 años. Incluso en los presupuestos generales de la Comunidad de Madrid para 1999 existe ya una partida (la 6.406) que reserva 150 millones de pesetas para "grandes operaciones regionales" (GOR). En este apartado se puede leer el nombre de la gran transversal entre diferentes operaciones urbanísticas y de comunicaciones.

El túnel de conexión es una apuesta clara, aunque teórica, de los técnicos regionales para desatascar el centro de la capital; es decir, lo mismo que pretende el Ayuntamiento de Madrid, de la mano del Ministerio de Fomento, con la construcción de sus polémicas autovías de peaje. Este túnel, de llevarse a cabo, permitiría la conexión directa entre los pasillos ferroviarios del este y del sur de la región, actualmente enlazados a través de la estación de Atocha, ya muy congestionada por el actual tráfico de viajeros.

La C-5, la línea de Móstoles, es la de mayor afluencia de viajeros de toda España, con 290.000 usuarios al día.

La C-2, que atraviesa el corredor del Henares, mueve diariamente unas 55.000 personas. En total, 345.000 viajeros. El proyecto de autopistas del alcalde José María Álvarez del Manzano, del PP, está pensado para absorber 350.000 vehículos al día.

Actualmente, todos los movimientos ferroviarios en el interior de la capital se realizan a través del eje subterráneo Atocha-Chamartín, que discurre bajo el asfalto del paseo de la Castellana, la columna vertebral de Madrid.

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Cuatro estaciones

El proyecto del túnel incluye cuatro nuevas estaciones de cercanías en plena capital

Cortés insiste en que el Plan Estratégico Regional incluye miles de ideas: "Unas se realizan y otras no, y ésta no se encuentra entre nuestras prioridades". Por ello, el consejero de Obras Públicas rechaza de forma tajante que "se trate de una respuesta" al plan de las autopistas subterráneas del Ayuntamiento de Madrid. "Ellos tienen ya un proyecto; nosotros, no", señala. Por su parte, el presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, insistió el pasado viernes en que para solucionar el problema del tráfico en la capital es necesario apostar por el transporte público."No es un problema de que los coches lleguen antes a la ciudad, sino que es un problema de que existan alternativas de calidad y seguridad. Y por eso, nosotros apostamos por el metro y por el tren de cercanías", afirmó.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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