Borrell impulsa una proposición de ley para la elección directa de alcaldes
El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, José Borrell, reforzó ayer con su presencia la presentación de una proposición de ley para que los alcaldes sean elegidos directamente por los ciudadanos en una urna específica. Los ediles se votarían en otra urna, según la iniciativa inscrita en el registro del Congreso. La intención fundamental es poner en manos de los ciudadanos la elección del alcalde, que no sería escogido en un pleno por los concejales como ahora, lo que evitaría las coaliciones poselectorales y el transfuguismo.
La proposición de ley establece que las alianzas para respaldar a un alcalde deberán quedar configuradas antes de las votaciones, con objeto de evitar que el acuerdo poselectoral entre dos grupos minoritarios permita arrebatar la presidencia del municipio al candidato de la lista más votada.La propuesta pretende ser un antídoto contra el transfuguismo y aumentaría la estabilidad de las corporaciones municipales, ya que el alcalde tendría garantizada la elección del 55% de los concejales del consistorio. El 45% restante se distribuiría entre las otras candidaturas. Aunque se produjeran cambios en la composición de los grupos, por ejemplo por el abandono de algunos de sus integrantes, el alcalde no vería amenazada su estabilidad, ya que estaría excluida la posibilidad de una moción de censura.
Junto a esta propuesta, ayer trascendía el contenido del pacto electoral suscrito entre el PSOE y Nueva Izquierda, que limita a esta segunda fuerza sus candidaturas y la compromete a renunciar "expresamente a presentarse individualmente en ninguna circunscripción electoral". El documento por el que NI y socialistas se comprometen a formar coaliciones políticas subraya que "queda claro que, en todos los casos, sólo habrá un grupo parlamentario correspondiente a la fórmula electoral elegida". Diego López Garrido, secretario general de NI, matizó ayer que "no se trata de una renuncia, sino del resultado de un pacto global".
El manifiesto firmado por ambas fuerzas sólo hace referencia a Nueva Izquierda cuando dice: "NI asume que en el conjunto de España y en todos y cada uno de los niveles electorales apoyará la candidatura conjunta, renunciando expresamente a presentarse individualmente en ninguna circunscripción electoral". En nada menciona el papel del PSOE en estos casos. Pero tampoco NI ha hecho un mal acuerdo. El escrito recomienda a los órganos territoriales que en toda España se dé presencia a representantes de NI en las listas e, incluso, si se ganan las elecciones, se les incluya en los gobiernos, autonómicos y locales.
En las europeas, NI y PSOE acuerdan la constitución de una coalición que agrupe a los dos partidos y que estará "abierta a otros colectivos que coincidan en este programa común europeo". Respecto a Madrid -capital y comunidad-, ambas fuerzas se presentarán constituyendo "una coalición electoral".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.