La nueva táctica de Clemente

Javier Clemente se sacó del zurrón ayer una táctica que fue una verdadera declaración de intenciones: un inopinado y seguramente inaudito 5-5-0. La defensa poblada le había dado un resultado extraordinario en sus últimos partidos y decidió repetirla y traicionar sus deseos de la jornada previa de salir a resolver la eliminatoria en el campo del Bolonia.Oli, que había jugado un partido espléndido en Oviedo se quedó fuera, y Denilson se perfilaba como el único punta posible.

Pero el final del cuchillo se quedó romo y el brasileño se dedicó a jugar bastante más retrasado de los lugares en los que sería posible marcar.

En los pocos partidos que lleva en el Betis, Clemente había jugado con cuatro y cinco defensas y con uno o dos delanteros, pero jamás sin ninguno.

Ayer, el primer gol del Bolonia dejó a los béticos sin saber a qué estaban jugando. El experimento de Denilson como hombre más adelantado volvió a dejar en evidencia la falta de gol del brasileño, que estuvo todo el partido desnortado, se ganó una tarjeta amarilla en una entrada infantil (no podrá jugar en Sevilla en el partido de vuelta) y acabó sustituido y muy enfadado en la segunda parte.

Clemente reiteró el lunes que no le importan los nombres de los jugadores. Ayer lo demostró poniendo a Gálvez en el lateral derecho. El entrenador lo justificó porque, dijo, "es un hombre muy rápido".

Pese a la derrota, Clemente se mostró ayer tranquilo en Italia antes de regresar a Sevilla. "No creo que haya hecho ningún experimento", afirmó. Sobre la ausencia de Oli del equipo titular , argumentó: "Juegan 11 y alguno se tenía que quedar fuera".