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La huelga en los trenes europeos afectó sobre todo a Francia y Bélgica

Francia y Bélgica fueron los países más afectados ayer por la huelga convocada en los ferrocarriles de Bélgica, Grecia, Francia, Luxemburgo, Portugal y España en protesta por los planes de liberalización que baraja la Comisión Europea y que discutirán la próxima semana los ministros de Transportes de la UE. En España se cumplieron los mínimos establecidos. El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, aseguró que la protesta "no está justificada".

En Bélgica y en Francia , los países -junto con Luxemburgo- en los que más oposición levantan los planteamientos liberalizadores de la Comisión Europea, la convocatoria de huelga de la Federación Sindical Europea de Transportes (FST) se dejó notar de forma importante. También en Grecia la huelga afectó mucho a los servicios ferroviarios.Bélgica despertó ayer prácticamente sin servicio de ferrocarril, y en Francia la huelga afectó a todas las grandes líneas y a los servicios de enlace con otros países, incluido el del Canal de la Mancha a través del Eurotúnel.

En España, la jornada se saldó con la inevitable guerra de cifras sobre participación. Renfe destacó la práctica normalidad de la jornada, con el cumplimiento de los servicios mínimos establecidos. La empresa, a última hora de la tarde de ayer, fijó la participación en la protesta en un 20,8% (3.819 empleados sobre un total de 18.310 que debían trabajar) una vez descontados los empleados adscritos a los servicios mínimos y el personal en situación de vacaciones o de descanso.

Cifras polémicas

Frente a estas cifras, el sindicato CC OO aseguró que la participación en la huelga llegó al 83%. Fuentes del sindicato UGT, por su parte, manifestaron que los empleados de los ferrocarriles españoles habían seguido la huelga de forma "considerable". Tanto UGT como CCOO señalaron que los servicios mínimos fijados para la jornada (75% de los servicios habituales) habían sido "excesivos". Los únicos conatos de incidentes, según fuentes sindicales, se produjeron en el servicio del AVE, en protesta por la supuesta sustitución del personal que decidió sumarse a la huelga.El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, se refirió ayer a la huelga "europea" de ferrocarriles y aseguró al respecto que no está justificada "porque hacer una huelga para protestar por un proyecto de directivas comunitarias es algo que los ciudadanos no están en condiciones de comprender".

Para el titular de Fomento, la propuesta de liberalización del ferrocarril que defiende el comisario europeo de Transportes, Neil Kinnock, "no costaría puestos de trabajo". Arias-Salgado señaló que "ve con buenos ojos" la liberalización del sector, incluida la posibilidad de que afecte a los servicios de cercanías.

La Comisión Europea advirtió ayer del grave declive que sufre desde hace 30 años el transporte ferroviario en la UE y de la necesidad de revitalizarlo con un mejor equilibrio respecto a la carretera.

Según la Comisión, el declive del ferrocarril, que ahora se pretende corregir con un conjunto de medidas liberalizadoras, ha provocado la pérdida de medio millón de puestos de trabajo en Europa en los últimos 15 años. "Debemos hacer frente a la creciente congestión de las carreteras, que amenaza la libre circulación y la calidad de vida", señaló ayer el órgano de gobierno comunitario.

El Consejo de Ministros de Transporte de la UE se reunirá el día 30 para estudiar un conjunto de medidas para "mejorar la eficacia del sector ferroviario y armonizar las normas técnicas y para asegurar las condiciones de competencia entre los servicios ferroviarios internacionales".

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