Las novias más estrafalarias

Un ramo de novia puede ser una máquina de fotos polaroid. Una novia puede llegar a medir dos metros y medio de altura. Un vestido nupcial puede tener un gran agujero que deja al aire las posaderas. Una novia puede ir con la cara totalmente maquillada en verde. Cosas como estas se vieron el pasado martes en una pasarela dedicada a vestidos de antinovia, un desfile en el que participaron 19 diseñadores, unos con mucha fama, otros con ninguna, y que forma parte de la Semana Antimoda que organiza la periodista Vampirella, algunos diseñadores y la discoteca Joy.A Juan Rufete, que lleva años vistiendo a famosos personajes del mundo del espectáculo y a damas de la alta sociedad, le encantó la idea: "Haga usted el vestido con el que nadie se casaría nunca". "Estoy harto de hacer modelos para novias. Me entusiasma todo lo que sea divertido, estar al lado de las cosas rompedoras, novedosas", declaraba este diseñador momentos antes del desfile. A su creación la había bautizado como novia de fuego. El encargado de lucirlo era Dorian, una drag queen (hombre disfrazado de mujer deslumbrante) que ayer alcanzaba los 2,50 metros gracias a unos impresionantes zapatos de tacón. Pedro Valverde, el diseñador del vestido de boda de la infanta Elena, es otro de los que disfrutó el martes con la idea de hacer lo que le diera la gana en un vestido. "Ya le hubiera gustado poner macetas en el traje de la Infanta", decía Vampirela mientras el diseñador daba los últimos retoques a su modelo, que, efectivamente, llevaba colgando varias macetas.

"Queríamos presentar vestidos con los que no se casaría nadie pero tan divinos como un traje nupcial. Ahora que tanta gente no se casa, ¿nos vamos a privar de montar el numerito? Se trata de poder ser reinas por un día, un día cualquiera", explicaba Vampirella.

Trujillo y Acuña, dos diseñadores gaditanos, habían confeccionado un vestido a base de fotografías de bodas engarzadas con anilla. El ramo era la polaroid. Chaumen, llegado de Valencia, presentó dos guerreros y una diosa de aspecto virginal. "¿Antinovia? Porque represento una virgen y ya se sabe que las novias van para todo lo contrario", decía este creador. Había novias que se presentaban como del fin del milenio, pero del siguiente. Estaba la novia estilo "María Antonieta, pero en ácido" o la chica de calendario de los años cuarenta.

Aunque la mayoría de los diseñadores llevaban sus propios modelos, por la pasarela desfilaron las reinas de la noche madrileña junto a actrices y cantantes de moda. Estaba Psicosis González, La Madrina o Dorian, todos gente conocida en ambientes nocturnos. Participaron en el acto por diversión.