La policía detiene en Getafe a un hombre acusado de golpear, violar y dejar sin asistencia médica a su esposa

La negativa a mantener relaciones sexuales con su marido condenó a M. M. S., de 31 años, a una cama del hospital Universitario de Getafe, donde permanece ingresada desde el lunes pasado. Los médicos avisaron al juez de guardia, que ordenó la detención del agresor, Manuel L. J., de 30 años, cuando permanecía en el domicilio conyugal.La víctima silenció anteriores palizas (hasta tres, según la policía), pero la evidencia de las últimas lesiones (traumatismo abdominal con fractura del bazo, hematomas en el tórax y fuertes golpes en el brazo izquierdo) le impidió ocultar el maltrato. Todas las heridas fueron diagnosticadas de "graves" por los médicos del hospital.

La víctima explicó a la policía en el centro sanitario que llevaba tres años casada con el ahora detenido y que son padres de dos hijos menores.

La relación de pareja comenzó a deteriorarse con los primeros encontronazos de recién casados, que después derivaron en palizas jamás denunciadas. M.M.S. no aguantaba más y estaba decidida a separarse de su cónyuge. El domingo pasado por la noche, Manuel quiso mantener relaciones sexuales con su esposa, pero ella le rechazó. De repente, el marido reaccionó con un aluvión de patadas y puñetazos, que culminó, siempre según la versión policial, con la violación de la joven, que llegó incluso a perder el conocimiento.

Al despertar, la víctima sintió un fuerte dolor en el abdomen y suplicó auxilio médico a su cónyuge. No tuvo suerte: la mujer tuvo que aguantar toda la noche dolorida. Por la mañana, en cuanto Manuel se marchó a trabajar, ella avisó por teléfono al servicio sanitario de urgencias de Getafe, que la trasladó en ambulancia hasta el centro sanitario del municipio.

Los propios médicos informaron de lo sucedido al juez de guardia, que ordenó la investigación del caso. Agentes de la policía judicial encontraron ayer a Manuel en su casa, ajeno al revuelo. De inmediato lo detuvieron bajo las acusaciones de agresión sexual y lesiones graves. El presunto agresor, que carece de antecedentes policiales, pasa hoy a disposición judicial.