Los afectados por la rotura del depósito de Melilla aún no han cobrado las ayudas
Ayer se cumplió, con duras críticas a la Administración central, un año de la rotura del depósito de Melilla que costó la vida a 11 personas y causó daños materiales valorados en más de 1.300 millones de pesetas. El depósito se encuentra aún sin reparar, y los damnificados sin cobrar las indemnizaciones prometidas. De las 447 solicitudes, 104 están paralizadas porque los interesados no han respondido a los requerimientos de la Administración, y 114 se encuentran pendientes ya sólo de pasar el trámite del Consejo de Estado, según anunció ayer el secretario de Medio Ambiente, que acompañaba en su visita a la ministra Isabel Tocino.Con la rotura del depósito, que servía para acumular reservas para el abastecimiento de la ciudad, cayeron 20 millones de litros de agua desde el barrio de Cabrerizas Altas, junto al polvorín de Horcas Coloradas, hasta la otra punta de la ciudad, la Plaza de España, quedando arrasado todo lo que encontraba a su paso el caudal de agua, barro y escombros. En total, el siniestro afectó a 500 personas, entre las que se encuentran también las que perdieron sus vehículos, sus comercios y otros enseres.
Mustafá Aberchán, consejero de Medio Ambiente, replicó ayer a la visita de Isabel Tocino con amargas palabras: "Melilla no está para viajes sorpresa como el que se ha preparado la ministra ni para cumpleaños. Lo que le pedimos es que agilice las indemnizaciones y la construcción de un nuevo depósito, ya que en verano esta ciudad se encontrará con graves problemas de abastecimiento. Esperemos que las visitas ministeriales sirvan para algo más que para darse un paseo y salir en la foto".
Isabel Tocino aseguró en rueda de prensa que se acelerará el pago de las indemnizaciones y que se construirá "un nuevo depósito con todas las medidas de seguridad para evitar cualquier riesgo, con las mismas con las que se realizan los embalses y las presas. La construcción", añadió, " está valorada en 588 millones de pesetas".
El consejero de Economía, Juan José Imbroda, repondió así a estas palabras de la ministra: "Encima de que viene un año después a hablar de un problema que no está solucionado, nos promete que se harán los nuevos depósitos en conciencia y con todas las medidas de seguridad. Tal vez piense que debemos darle las gracias porque nos merezcamos un mínimo de atención y de trabajo bien hecho dejando ya las chapuzas a las que estamos acostumbrados los melillenses".
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