"El diálogo es la mejor arma para no matar y convivir en paz"

A pesar del título de la novela, Regreso a las armas, Andrés Sorel, autor de 30 libros, quiere expresar que no todas las armas son asesinas. "El diálogo es la mejor arma para no matar y aprender a convivir en paz", dice el escritor. Para llegar a ello se sirve en su historia de los ojos de una mujer, Alma Arriaga, quien a través de sus amores, sus desesperanzas y el gran cariño que siente hacia su tierra ofrece una visión particular de los últimos cien años del País Vasco. La novela ha sido publicada por Txalaparta. Pregunta. ¿Por qué los ojos de una mujer? Respuesta. He elegido a tres generaciones, que tienen como protagonista a una mujer, porque las tres llevan el mismo nombre, Alma Arriaga, para contar tres momentos críticos de la historia del País Vasco. El primero, transcurre al final la II Guerra Carlista en Estella, donde se refleja la lucha entre el mundo rural que se extingue y la industrialización con todas las consecuencias políticas que esto genera; el segundo se desarrolla en torno a Gernika, cuando ocurre el bombardeo; y el final tiene lugar en la época actual, cuando la protagonista hereda los diarios de sus dos antepasadas y escribe su propia historia presente. El hecho de que sean estas mujeres las que cuentan su experiencia personal permitirá distanciarse al lector de cualquier dependencia política. Ésta es simplemente su historia, la de ellas. P. ¿Qué significado tiene la música que se escucha, por así decirlo, constantemente en la novela? R. Por una parte está el apellido de la protagonista, Arriaga, que es un homenaje al compositor vasco y a toda la vida musical de aquella época, y por otra, la presencia de la música de Beethoven P. ¿Qué sentido tiene el cambio de la forma de narrar en cada capítulo? R. En la primera parte, que transcurre en el siglo XIX, he buscado una forma de novela tradicional en la que el paisaje físico complementa al humano y un tono épico para expresar los sentimientos y emociones de los protagonistas, un poco a la manera de las novelas de Valle Inclán o al estilo de Guerra y Paz . La tragedia de Gernika está contada mediante un monólogo interior en el que el horror forma una masa coral disgregada como lo hiciera Picasso en su cuadro. En la última parte el estilo se corresponde con el de nuestro tiempo. P. ¿Cómo ve el adiós a las armas en Euskadi? R. La idea es que se abra un proceso en el que todos, tanto la cultura, la política como la economía se pongan de acuerdo, a través del diálogo por su puesto, en el tipo de país quieren construir. Para ello es preciso que cada una de las partes involucradas abandone sus armas y así todos disfruten de las mismas posibilidades. Lo ideal sería crear una gran mesa por la paz en la que todos puedan sentarse.