Domingo de maratón

Mañana será un domingo pleno de maratón, la prueba más histórica del atletismo. Nueva York y Amsterdam serán los escenarios de dos carreras con presencia española clave. Abel Antón y Martín Fiz, los dos primeros espadas, correrán a 5.800 kilómetros de distancia tras haberse frustrado su duelo en un solo escenario. Y lo harán con dos objetivos bien distintos. Antón, ante más enemigos potentes y en un trazado difícil, el neoyorquino,tratará de ganar tácticamente el maratón más prestigioso (Eurosport y La 2, 16.30). Fiz, en el más llano de Amsterdam, intentará antes (Eurosport, 12.30) batir el récord de España y acercarse al mundial.A finales del año pasado, después de la polémica carrera del Mundial de Atenas ganada por Antón en los últimos metros ante un Fiz que no pudo dejarle a pesar de su ritmo, Miguel Ángel Mostaza, el representante de ambos, trató de montar una suculenta revancha. Cien millones de pesetas de fijo para cada uno y un millón de dólares (unos 140 millones de pesetas) para el vencedor, además de otro gran premio si superaba el récord del mundo. La primera idea era hacerlo en España y se barajaron hasta cinco ciudades, Valencia, Málaga, San Sebastián, Barcelona y Sevilla. Mostaza lo dejó porque los patrocinadores no se decidían: "Decían que sí, que sí, pero a la hora de poner el dinero, nada". En el extranjero pudo ser en Japón y al final surgió Nueva York. La carrera del 1 de noviembre, descartada también una especial para el duelo, con liebres, coincidía con las fechas ideales y no importaba el gran número de participantes, porque en las grandes carreras los mejores salen en cabeza. Sólo faltaba encontrar un patrocinador al margen, dado el alto costo del proyecto. Y apareció. Pero todo se torció a última hora. "La empresa americana, de la que no teníamos ni la más mínima sospecha, y no dudo que habría cumplido" dice Mostaza, "quiso cambiar las condiciones sin garantizar el 50% del montante por adelantado. Si hubiera sido un proyecto de 20.000 o 30.000 dólares no habría importado, pero en éste, no. Yo no juego con los intereses de otras personas. Todo estaba previsto para firmar el 19 de septiembre, en el Empire State, cuando fui a la Milla de Nueva York".

De todas formas, el tema no está terminado, según Mostaza. "La gente lo sigue pidiendo y podría hacerse a primeros de año, antes de los Mundiales de Sevilla, en agosto. Tiempo hay, aunque la idea era hacerlo este año". El representante reconoce que una lesión de espalda de Antón, tipo ciática, que le afectó dos semanas en la preparación, también influyó. "Te entra inseguridad, porque además él no se lesionaba desde hacía cinco o seis años, pero no fue la causa principal. Son profesionales y vuelven pronto a la forma". El mismo Antón ha dicho que no va con la misma puesta a punto de Londres, cuando el pasado 26 de abril ganó su cuarto maratón, de sus cinco disputados, con 2.07.57 horas. Fue la segunda marca española de siempre tras la conseguida una semana antes en Rotterdam por Fabián Roncero, 2.07.26, lesionado después.

Roto el duelo, Antón y Fiz (sin duda dos de los tres o cinco mejores atletas de la historia española, ahora que la Federación Internacional se ha decidido por Fermín Cacho como número uno) se repartieron las carreras. No hubo problemas. A Antón le va mejor una más dura al final, como Nueva York (los últimos ocho kilómetros con cuestas) para imponer su tremenda fuerza en las llegadas, y a Fiz exhibir su tren altísimo en un recorrido más llano y mejorar su marca (2.08.05). Antón tendrá los enemigos más temibles. Desde el surafricano Thugwane, campeón olímpico en Atlanta 96 (2.07.28 en Fukuoka en 1997) hasta el mexicano Silva, ganador en 1994 y 1995, o el brasileño Lima, pasando por los kenianos encabezados por Chebet (2.07.37), Kagwe, ganador en 1997 (2.08.12) o el debutante Githuka (2.07.28).