Urbanismo de Málaga culpa a la Junta de frenar los planes de viviendas

La polémica entre la Junta y el Ayuntamiento de Málaga en torno al plan municipal de viviendas para jóvenes ha sido la punta del iceberg. Ambas administraciones mantienen serias discrepancias sobre el grado de cumplimiento del actual convenio que suscribieron en agosto de 1997 y que según la Junta va a provocar que, este años, se tengan que retraer unos 800 millones de inversión por falta de suelo. El PP afirma que la Junta frena algunos proyectos, mientras la oposición [EN] advierte de la creación de nuevos guetos en la ciudad.

Francisco de la Torre, concejal responsable del área de Urbanismo, niega que la falta de suelo sea la causa del retraso en la ejecución del convenio y sólo admite algunos problemas derivados del "bloqueo de los grupos de oposición" a varios proyectos, que impiden iniciar actuaciones como la que se pretende ejecutar en La Corta, donde se van a levantar 120 viviendas sociales. De la Torre, además, acusa a la Junta de frenar otras actuaciones aprobadas por la Delegación en Málaga y a las que, dice, los servicios centrales de la Consejería han puesto "bastantes problemas técnicos". "Espero equivocarme, pero tengo la impresión de que hay interés en frenar algunos proyectos por parte de la Junta", indica el edil respecto a planes programados para las calles Parra y Alta, en el centro de la ciudad. De la Torre, además, rebaja a la mitad, unos 400 millones, el dinero que la Junta no podrá gastar este año ante la falta de proyectos. Tanto Izquierda Unida como el PSOE coinciden en señalar que los retrasos se están originando por la falta de suelo, un patrimonio municipal que, según aseguran, ha sido "dilapidado" para obtener dinero con el que financiar inversiones. Ambos partidos, sin embargo, consideran que detrás de esta polémica hay un problema de fondo y acusan al equipo de Celia Villalobos de realizar una política de viviendas que está provocando la creación de nuevos guetos en la ciudad, al propiciar la concentración en zonas problemáticas. Complejos sociales Francisco Oliva, candidato del PSOE a la alcaldía de Málaga, admite que su partido se ha opuesto en cuatro ocasiones a la actuación en La Corta y anuncia que mantendrán esta posición. Según Oliva, se trata de edificar 120 viviendas sociales en una zona donde hay ya 220, "por lo que se terminará creando un nuevo gueto". IU coincide en este planteamiento y afirma que no son suficientes los planes del consistorio para poner en marcha un plan de integración social en la zona, que incluya equipamientos e infraestructuras. José Luis Portillo, portavoz adjunto de la coalición, sostiene que el equipo de Villalobos ha logrado el desmantelamiento de los núcleos de infraviviendas de Huerta del Correo y Hacienda Cabello, donde unas 200 familias vivían en condiciones infrahumanas, pero alerta: "No se puede cambiar un gueto de casas de lata por un gueto de viviendas normales, porque el problema social no sólo se resuelve con una casa, sino con un plan de intervención social". Ambos partidos coinciden igualmente en censurar la concentración de viviendas sociales en el extrarradio del centro histórico de la capital, fundamentalmente en las calles Parra, Divina Pastora y Los Negros. "Estamos a favor de rehabilitar el centro de Málaga, pero no concentrando las viviendas en cuatro calles", censura Portillo.