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ELECCIONES EN EL PAÍS VASCO

La izquierda 'abertzale' no quiere la independencia si implica una fractura social, afirma el líder de EH

Aurora Intxausti

Durante el debate celebrado en la noche del jueves en la Cadena SER en San Sebastián entre Rosa Díez, número dos del PSE-EE por Vizcaya; Arnaldo Otegi, número uno por Guipúzcoa de Euskal Herritarrok (EH), y Joseba Egibar, cabeza de lista del PNV por esa misma provincia, el representante de la plataforma en la que se integra HB afirmó que la izquierda abertzale desea una Euskadi independiente, pero para conseguirlo quiere una adhesión mayoritaria de los vascos. "No de un 51 frente a un 49%, porque no haríamos más que fracturar por la mitad a la sociedad vasca", dijo.

Otegi habló de la falta de libertades en Euskadi, reivindicó su pasado en ETA, del que dijo que estaba "orgulloso", y aludió a la guerra sucia por la que están condenados, entre otros, el ex ministro del Interior José Barrionuevo y el ex secretario de Estado para la Seguridad Rafael Vera.

Díez, que polemizó con sus dos oponentes tanto en el tema de la autodeterminación como en el de la consecución de la paz, le replicó que si sus dos compañeros del PSOE son culpables de los delitos que se les imputan, "que paguen". Pero, al mismo tiempo, instó al propio Otegi a pedir lo mismo para los presos de ETA condenados por actividades terroristas.

Pocos gestos

Fueron escasas las miradas que se cruzaron a lo largo de hora y media de debate entre Rosa Díez y Arnaldo Otegi y tan sólo en una ocasión se hicieron un gesto amable para intercambiarse una botella de agua. La militante socialista dijo que no quería mirar a Otegi desde el rencor, a pesar de su pasado, pero que tampoco deseaba que fuese reconocido como "ciudadano ejemplar del año, ni tampoco que dé lecciones de democracia". Y añadió que su deseo era "reintegrar al portavoz de HB y a los que piensan como él en el sistema democrático". El candidato de EH, que no quiso entrar a polemizar en ese tema, se refirió a ETA y dijo que en estos momentos mantiene "una iniciativa política de fuerte calado que consiste en mantener una tregua unilateral y sin condiciones". "No va a haber actividad armada... Hasta que ETA decida lo contrario. Si es que lo decide en un escenario que nadie pretende ni quiere", agregó.

La mayor parte del debate estuvo dedicado a discutir sobre los modelos de Gobierno que deben existir en Euskadi. Otegi no tuvo reparos en decir que lo que desea su formación política es la independencia y que los vascos tienen derecho a elegir su futuro. Egibar, que no polemizó con Otegi y sí con Rosa Díez, dijo que su partido reclama el derecho de autodeterminación y condicionó la consecución de la soberanía plena al futuro: "Nadie puede impedir a un pueblo que pueda seguir desarrollando las cuotas de soberanía que entienda oportuno obtener en cada momento".

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Por su parte, la dirigente socialista defendió la Constitución y el Estatuto de Gernika. Además, añadió que "la autodeterminación no es un problema de los vascos, sino de los nacionalistas".

Otegi sacó a relucir el pasado socialista de su familia y Díez dijo alegrarse de ello. El dirigente de HB, nacido en Elgoibar (Guipúzcoa), tiene sus orígenes en Eibar, el primer municipio de España en el que se proclamó la República. Tal vez por sus antecedentes políticos el dirigente de HB manifestó su deseo de que "entre todos los vascos, incluidos los socialistas, se debe construir el país".

Díez, por otro lado, reprochó a Egibar que el PNV no se haya pronunciado claramente sobre su verdadero objetivo: conseguir la independencia.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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