El máximo órgano de Izquierda Unida rompe cualquier posibilidad de diálogo con los socialistas

El coordinador regional de Izquierda Unida (IU), Antonio Romero, dijo ayer en Córdoba que en la actualidad no se dan las condiciones necesarias para un diálogo de unidad de acción de la izquierda con el PSOE en Andalucía. Así se planteó en el Consejo Andaluz, máximo órgano de decisión, que aprobó casi por unanimidad (sólo hubo tres abstenciones) el informe político de su dirección regional y el programa marco que expone las líneas maestras básicas que deben recoger los programas electorales para las elecciones municipales de junio de 1999.

Al dar este paso, Romero le ha hecho los deberes al PSOE, formación que a principios del curso político lanzó un oferta de acuerdos a IU siempre en el ámbito del Parlamento. Aunque desde el PSOE las esperanzas de que fructificasen las conversaciones eran prácticamente nulas, la dirección regional socialista acordó tender la mano a IU, como un paso más de marcar la iniciativa política andaluza. Ahora, el PSOE se ahorra el trabajo de aparecer como el causante de la ruptura. En este tiempo, Izquierda Unida y el PSOE no se han puesto de acuerdo ni en la fecha, ni en el temario, además de que desde el sector más radical de la federación -el del Colectivo Unitario de Trabajadores de Juan Manuel Sánchez Gordillo- emplazó el lunes pasado al coordinador regional a poner fin a los contactos para no caer en el "ridículo". Romero dijo ayer que el diálogo con el PSOE "se ha cerrado en la práctica" y responsabilizó de ello a los socialistas, por una parte, por haber "blindado los presupuestos de la Junta de Andalucía con el Partido Andalucista" y por haber dejado fuera de ese documento asuntos irrenunciables para IU. Cualquier acuerdo sobre política económica y social debe plasmarse, según Romero, en el Presupuesto como elemento estructurante del mismo: las 35 horas, con las partidas presupuestarias necesarias para que se aplique en el sector público, la renta básica y el fondo andaluz de cooperación municipal, que debe estar dotado con 80.000 millones de pesetas. [El vicesecretario general del PSOE, José Asenjo, coincidió ayer con Romero en que "no se dan las condiciones" para llegar a acuerdos con IU, lo que achacó a "la falta de voluntad real de IU para cambiar el marco de relaciones", informa Efe. Asenjo dijo que para IU el "enemigo principal" sigue siendo el PSOE]. Además, en el informe político, IU indica: "No podemos avalar a un PSOE que se empeña en defender la peor salida posible al futuro del Estado, la salida del centralismo y el pordioseo". A este respecto, el dirigente de IU dijo que Manuel Chaves, como presidente de la Junta de Andalucía, "tiene que encabezar una actitud claramente federalista, sin miedo a la reforma constitucional, para que Andalucía juegue, una vez más, el papel que le corresponde en la conformación de un Estado federal, solidario y respetuoso con los derechos nacionales". Romero añadió que en lo que va de octubre no ha habido ninguna conversación entre PSOE e IU. "Hemos estado a la espera de que fijarán la fecha, pero no han querido [el PSOE] discutir con nosotros los contenidos presupuestarios, luego ya no tiene ningún sentido un diálogo en esa dirección". Afonía andaluza El consejo andaluz de Izquierda Unida decidió también abrir el debate sobre la reforma de la Constitución, para que la Carta Magna recoja el Estado federal y solidario y el derecho a la autodeterminación. En este sentido, Romero dijo que IU va a poner la voz en ese debate "porque Andalucía no lo hace; porque Chaves está afónico en este asunto, ya que no comparece en el Parlamento de Andalucía", para explicar la posición del PSOE en este tema, "mientras que al mismo tiempo pide intervenir en el Senado". Acusó a Chaves de "seguir estrategias ajenas a los intereses de Andalucía". Por otra parte, el consejo regional de IU acordó que sus alcaldes firmen el próximo 4 de diciembre en Antequera (Málaga) la que se ha denominado Declaración de Córdoba, manifiesto político que abunda en la necesidad de que Andalucía lidere la reforma constitucional.