El ex gerente de Adigsa, forzado a devolver la indemnización que él mismo se pagó

El anterior gerente de la empresa pública Adigsa, Ferran Llovet, se autoindemnizó con 60 días por año al dejar su plaza como contrato de alta dirección de la Generalitat. Llovet recibió más de 11 millones de pesetas por esta vía en agosto y fue requerido por el Consejo de Administración para que los devolviese por improcedentes. Finalmente, el asunto se resolvió a finales de septiembre tras numerosas gestiones, entre otros, de Felip Puig, secretario de organización de Convergència Democràtica (CDC). El gerente de Adigsa, nombrado el 29 de enero de 1996, presentó su dimisión al Consejo de Administración de la empresa pública el pasado 29 de julio con motivo de su marcha al sector privado. Como quiera que dejaba su plaza como contratado de alta dirección, Llovet se autoindemnizó con más de 11 millones de pesetas. Para el cálculo decidió estimar que tenía derecho a percibir 60 días por año de trabajo, muy por encima de lo que le correspondía. Oficialmente, el Departamento de Bienestar Social afirma: "Llovet se marchó a una empresa de energía eólica porque quiso y no tiene cuentas pendientes con el departamento. Para nosotros no hubo incidente alguno reseñable". Sin embargo, las negociaciones entre los abogados del ex gerente y la Generalitat se alargaron hasta finales de septiembre, según fuentes del consejo de Adigsa. El negociador del arreglo fue el ex secretario general del departamento dirigido por el consejero Comas, Felip Puig, hoy secretario de organización de CDC. Puig consiguió recomponer la cuestión monetaria y que Llovet retornase la autoindemnización. Sin embargo, otras heridas quedaban abiertas. Por ejemplo, Llovet remitió antes de marcharse un acta notarial sobre una reunión del Consejo de Administración en la que se le aprobaba la gestión. La supuesta acta de la reunión sólo fue firmada por el propio Llovet ya que, según fuentes del consejo, no es real "porque el consejo nunca tomó esa decisión". La situación ha provocado numerosas tensiones, entre las que destaca la originada por CC OO, que ha solicitado que se audite a la empresa Adigsa. El sindicato sopesa iniciar acciones legales, según afirmaron responsables de la federación de administraciones públicas de CC OO. Llovet había ejercido un papel importante en la polémica sobre si Adigsa debía dedicarse a gestionar las viviendas de protección oficial o a adjudicarlas. Esta polémica creó muchos problemas a Bienestar Social, al que otros departamentos acusaban de invasión de competencias. El gerente de Adigsa comenzó a trabajar en la empresa en 1988 como abogado y luego fue jefe de la asesoría jurídica de la empresa de la Generalitat. Llovet fue gerente durante unos dos años.