El escándalo se amplifica
Contraofensiva de los clubes italianos investigados por la presunta utilización de drogas
El AC Parma y el Juventus de Turín, los dos grandes clubes que protagonizan el escándalo del dopaje que sacude desde hace dos meses al fútbol italiano, han pasado al contraataque y han denunciado una campaña de difamación y calumnias criticando duramente a la prensa.Los dirigentes de los dos clubes se han revelado contra una "increíble campaña de difamación", después de haber estado en el centro de nuevas revelaciones sobre el dopaje en el calcio.
El Parma, uno de los clubes con mejor historial europeo y entre los candidatos al título, está en el centro de las investigaciones. Una fuente judicial reveló el viernes que 24 jugadores de este club presentaban una tasa de hematocrito anormalmente alta y particularmente elevada en el caso del portero suplente, Alessandri Nista y el delantero Roberto Stellone que presentaron el pasado 27 de julio unas tasas del 63% y el 52% cuando una tasa del 50% ya induce a la sospecha de haber ingerido EPO (eritropoietina), una droga prohibida que aumenta considerablemente la oxigenación de la sangre. "Estos resultados son parciales y no tienen nada que ver con la utilización de sustancias prohibidas", respondió de forma inmediata el club parmesano que estudia el inicio de acciones judiciales.
Por su parte, el Juventus, el primer club puesto en tela de juicio por las denuncias del entrenador del Roma, el checo Zdenek Zeman, ha roto igualmente su silencio y ha anunciado acciones legales, especialmente contra una radio privada de Roma, Radio Piu, que había citado los nombres de Alessio Tacchinardi y del uruguayo Paolo Montero.
Uno de los jugadores de la Juve, el internacional Paolo Pecchia, fue escuchado el viernes por el procurador de Turín encagado de la investigación, Raffaele Guariniello, que anteriormente había interrogado a Alessandro Del Piero, Gianluca Vialli, ahora entrenador del Chelsea, Zinedine Zidane, Didier Deschamps y también algunos directivos del club.
El presidente del Juventus, Vittorio Chiusano, anunció ayer que emprenderá acciones ante los organismos competentes para "proteger a la sociedad de una investigación medieval". Chiusano criticó con dureza los métodos de Guarinello. La estrategia legal de tutela de los miembros del club turinés es "retroactiva", y se incluyen en la misma todas las acciones precedentes, como la querella contra el técnico del Roma, Zednek Zeman.
Dino Zoff, seleccionador italiano, opinó ayer que es necesario ir al fondo de las cosas y lo más rápidamente posible. Preguntado por la cadena de televisión, RAI 2, Zoff agregó que no cree en una criminalización general del fútbol.
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